La Familia Real Británica supervisa bienes por valor de decenas de miles de millones. Desde el palacio de Buckingham hasta las joyas de la Corona, estos tesoros se mantienen en fideicomiso para la nación y técnicamente no pertenecen a los Windsor. La "Firma" posee la Casa de Sandringham y el Castillo de Balmoral, una cartera de otras propiedades, joyas, arte, caballos de carreras y mucho más. Pero estas preciadas posesiones privadas no están repartidas por igual entre la familia, y algunos miembros son mucho más ricos que otros...

Del menos al más adinerado, haz clic o desplázate por la galería para averiguar cuánto se calcula que valen hoy 30 miembros destacados de la realeza británica. Todas las cantidades están en dólares estadounidenses, las cifras en euros son conversiones aproximadas que podrían cambiar.

Adaptado al español por Ana Sabin Paz, redactora en español para loveMONEY.

El menor de los hijos de William y Kate, el príncipe Louis, cuarto en la línea de sucesión al trono, tiene probablemente una fortuna personal de $500.000 (465.000 euros) o algo así, según las estimaciones más fiables de su hermano mayor George. Lo más probable es que se trate de regalos que ha recibido el miembro de la realeza de cinco años, así como herencias, fondos fiduciarios, etc.

Por otra parte, una investigación de la revista Reader's Digest, reproducida por el periódico británico The Express el mes de julio, afirma que el príncipe aporta hasta $125 millones (116,3 millones de euros) a la economía del Reino Unido.

Tercera en la línea de sucesión, la princesa Charlotte probablemente tenga también una fortuna personal de $500.000 (465.000 euros).

Pero cuando se trata de su valor para la economía del Reino Unido, Charlotte eclipsa a sus dos hermanos. Reader's Digest cree que vale una suma de $5.000 millones (4.700 millones de euros) gracias al llamado "efecto Charlotte", que hace que el público acuda en masa a comprar ropa y juguetes que la joven reina lleva puestos o con los que juega.

La estimación más fiable de Internet sitúa el patrimonio neto actual del príncipe George en $500.000 (unos 465.000 euros).

El futuro rey de 11 años se hará mucho más rico más adelante gracias a regalos y herencias, por no mencionar los ingresos de los lucrativos Ducados de Cornualles y Lancaster, los imperios inmobiliarios reales que generan millones de libras al año para el monarca y el heredero varón.

Reader's Digest cifra su valor para la economía del Reino Unido en $3.000 millones (2.800 millones de euros).

Sarah Ferguson ha admitido no ser buena con el dinero, ya que ha estado "continuamente al borde de la bancarrota financiera". Sin embargo, la exesposa del príncipe Andrés no es tacaña y ha conseguido dinero de muchas maneras, desde protagonizar campañas publicitarias de Weight Watchers hasta escribir novelas subidas de tono. Más recientemente, incluso fue presentadora invitada en el programa diurno británico This Morning.

Además, Fergie consiguió dinero en 2022 para hacerse con una propiedad de $6,3 millones en el elegante Mayfair londinense (5,9 millones de euros). Según algunas fuentes, actualmente tiene un patrimonio neto estimado en $1 millón (0,9 millones de euros).

La princesa Eugenie, hija menor del príncipe Andrés y Fergie, vale hasta $4,5 millones (4,2 millones de euros) según las estimaciones. Eugenie no es miembro activo de la realeza, por lo que no recibe dinero de los contribuyentes, pero tiene un trabajo como directora asociada de la galería de arte contemporáneo Hauser & Wirth, que probablemente le reporta un buen sueldo.

La princesa también se ha beneficiado de varios millones de los fondos fiduciarios creados por la difunta reina y la reina madre.

Las princesas Eugenie y Beatrice fueron excluidas de la lista de miembros de la realeza que reciben dinero del gobierno del Reino Unido cuando se graduaron en la universidad, que en el caso de Beatrice fue en 2011.

Tras desempeñar varios trabajos, incluido el de dependienta en los grandes almacenes Selfridges, Beatrice consiguió un puesto, sin duda bien remunerado, en la empresa tecnológica neoyorquina Afiniti, centrada en la inteligencia artificial, como vicepresidenta de Asociaciones y Estrategia. Al igual que su hermana, la princesa Beatrice cuenta con fondos fiduciarios familiares a los que recurrir.

Nieta del príncipe Eduardo, duque de Kent, Lady Amelia Windsor ocupa el humilde puesto 43 en la línea de sucesión, pero tiene un perfil mucho más alto que el típico miembro menor de la realeza, gracias a su brillante carrera como fashionista. Lady Amelia ha trabajado entre bastidores para Chanel, Alaïa y Bulgari, y ha desfilado para firmas como Dolce & Gabbana.

Su patrimonio neto estimado oscila entre $1 millón (0,9 millones de euros) y $5 millones (4,7 millones de euros). Sin embargo, esa cifra podría ser mucho mayor si son ciertos los informes que afirman que gana $1 millón (0,9 millones de euros) al año por acuerdos con marcas y colaboraciones.

Las finanzas reales son complejas y están envueltas en secretos, por lo que no es de extrañar que las estimaciones de la riqueza personal de los Windsor tiendan a variar enormemente.

Es el caso por ejemplo, de la abuela de Lady Amelia, Catalina, duquesa de Kent. Esta discreta miembro de la realeza procede de una acaudalada familia de terratenientes y era bastante rica antes de casarse con el duque de Kent. Hoy se dice que posee entre $1 millón (0,9 millones de euros) y $10 millones (9,3 millones de euros).

Con un patrimonio estimado en $5 millones (4,7 millones de euros), Birgitte, nacida en Dinamarca, se casó con el príncipe Ricardo, duque de Gloucester. Trabaja a tiempo completo en la realeza junto a su marido.

Según el periódico británico The Guardian, la pareja ha recibido $15 millones (14 millones de euros) de la Subvención Soberana y su predecesora, la Lista Civil, para financiar sus compromisos reales a lo largo de los años.

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Independientemente rica antes de casarse con el príncipe Carlos, Camilla Parker-Bowles se benefició de una cuantiosa herencia cortesía de uno de sus abuelos.

Su bien más preciado es Ray Mill House, la finca de Wiltshire que compró en 1994 tras su divorcio por $1,1 millones. Eso son más de $2 millones en dinero de hoy (1,9 millones de euros), y es probable que la propiedad valga aún más ahora.

El príncipe Andrés fue destituido como miembro activo de la realeza y expulsado de la lista de Soberanos Subvencionados tras su desastrosa entrevista en Newsnight de la BBC en 2019. La entrevista se produjo en medio de las repercusiones que acompañaron al escrutinio de los estrechos vínculos de Andrés con el financiero caído en desgracia Jeffrey Epstein. En 2022, Andrew pagó a Virginia Giuffre unos $15,1 millones (14 millones de euros) para zanjar las acusaciones de agresión sexual, aunque se dice que la difunta reina cubrió parte del pago.

En el pasado, Andrew se ha beneficiado de polémicos negocios inmobiliarios, como la venta de su mansión de Sunningdale en 2007 a un magnate kazajo por $4 millones (3,7 millones de euros) por encima de las posibilidades. Pero aparte de una modesta pensión de la Marina, sus fuentes de ingresos prácticamente se han agotado. Se dice que, tras invertir millones en la renovación de Royal Lodge, su casa de Windsor, el príncipe se ve presionado para reducir su tamaño y, si no lo hace, podría tener que hacer frente a los gastos de mantenimiento.

De una realeza controvertida a otra. La princesa Michael de Kent se ha enfrentado a acusaciones de racismo y, según se dice, tiene un comportamiento arrogante, lo que le ha valido el apodo de "Princesa Pushy".

De la que la difunta reina se burló amablemente por ser "demasiado grandiosa para la Casa de Windsor", la aristócrata centroeuropea, que ha trabajado como diseñadora de interiores y autora, no es ciertamente la más grandiosa en términos de riqueza personal, con un patrimonio neto estimado de $5 millones (4,7 millones de euros).

Las estimaciones de Internet sobre la riqueza del príncipe Archie, de cinco años, oscilan entre $5 millones (4,7 millones de euros) y $10 millones (9,3 millones de euros).

Sin embargo, estas estimaciones parecen exageradas. Al igual que los hijos del príncipe William y Kate, los hijos del príncipe Harry y Meghan tienen relativamente poca riqueza personal propia, aparte de regalos, herencias y fondos fiduciarios.

Es probable que la princesa Lilibet valga más o menos lo mismo que su hermano, es decir, hasta $10 millones (9,3 millones de euros) según las estimaciones. Pero una vez más, estas cifras pueden ser elevadas.

Dicho esto, la niña de tres años no se limitará en el futuro a tareas reales como sus primos hermanos, por lo que tiene potencial para seguir los pasos de sus padres y ganar cantidades fenomenales de dinero en el sector privado.

Al parecer, los hijos de la difunta princesa Margarita, Lady Sarah Chatto y el vizconde Linley, heredaron la mayor parte de su patrimonio, valorado en $10,4 millones en 2002. Eso equivale a más de $18 millones en 2024 (16,7 millones de euros).

Los hermanos subastaron 800 pertenencias de su madre en una venta de Christie's en 2006 para cubrir una factura del impuesto de sucesiones de casi $4 millones ($6 millones hoy, unos 5,6 millones de euros), lo que les reportó casi $19 millones ($29,6 millones hoy, unos 27,5 millones de euros).

Estos ingresos, junto con los de la exitosa carrera artística de Lady Sarah, le han permitido amasar una fortuna personal de hasta $18 millones (16,7 millones de euros).

Puede que Kate Middleton fuera una plebeya cuando se casó con el príncipe William en 2011, pero no era una indigente. Se cree que Kate es la beneficiaria de un fondo fiduciario creado por los adinerados Middleton y que ha acumulado algunos bienes impresionantes como princesa, entre ellos el anillo de compromiso de su difunta suegra y un vestuario de diseño valorado en más de $1 millón (930.000 euros).

Según estimaciones más creíbles, la Princesa de Gales vale $10 millones (9,3 millones de euros). Sin embargo, su hermana Pippa, casada con un multimillonario, es más rica, con una fortuna estimada en $50 millones (46,5 millones de euros).

Inusualmente para un miembro de la realeza en activo, el príncipe Eduardo tuvo en su día un empleo en el sector privado al frente de su propia productora de televisión, pero lo abandonó en 2002 ante las acusaciones de que intentaba aprovecharse de su condición de miembro de la realeza.

A lo largo de los años, Eduardo y su esposa Sofía han recibido unos $8,2 millones (7,6 millones de euros) de la Subvención Soberana, y el patrimonio neto de Eduardo se ha estimado en $10 millones (9,3 millones de euros).

La duquesa de Edimburgo también trabajó fuera de la Familia Real, pero su carrera de relaciones públicas se vino abajo en 2001, tras ser descubierta haciendo comentarios despectivos sobre miembros de la Casa Real y otras figuras públicas en una operación encubierta de la prensa.

Al año siguiente, se dedicó a tiempo completo a los deberes reales, y el escándalo hace tiempo que se olvidó. Al igual que su marido, se dice que hoy vale $10 millones (9,3 millones de euros).

Se dice que el primo hermano de la difunta reina, el príncipe Eduardo, duque de Kent, ha recibido $23 millones (21,4 millones de euros) de la Lista Civil y la Subvención Soberana desde que empezó a desempeñar funciones reales en 1960.

Se dice que el duque, que vive con su esposa en una gran residencia dentro del palacio de Kensington, tiene un patrimonio de unos $10 millones (9,3 millones de euros) si se tienen en cuenta las herencias y legados.

La princesa Ana encabeza regularmente la lista de miembros de la realeza más trabajadores y ha recibido $21 millones (19,5 millones de euros) a lo largo de los años por desempeñar sus funciones oficiales.

En cuanto a bienes importantes, la Princesa Real posee una envidiable colección de joyas, probablemente valorada en millones, y es propietaria de la magnífica finca de Gatcombe Park, en Gloucestershire, que la difunta Reina le compró como regalo de bodas en 1976.

Como ya se ha dicho, el duque de Gloucester y su esposa Birgitte reciben dinero de la Subvención Soberana para cubrir sus obligaciones reales.

El primo hermano de la difunta reina y su esposa también se benefician de una casa de campo de gracia y favor en los terrenos del palacio de Kensington, tras haber reducido su tamaño desde un apartamento más grande. Pusieron a Barnwell Manor, su finca de Northamptonshire, en venta con Savills por $5,3 millones (4,9 millones de euros). Al parecer, la han vendido, lo que sin duda ha supuesto un aumento sustancial de las reservas de efectivo de la pareja.

Además de carecer de título real, Zara Tindall no es miembro activo de la realeza.

Esto significa que la hija de la princesa Ana ha tenido rienda suelta para seguir una carrera de éxito como amazona ganadora de medallas olímpicas, y ha ganado mucho dinero con acuerdos de patrocinio. Se calcula que el patrimonio neto de la deportista real ronda los $20 millones (18,6 millones de euros).

También se cree que Mike Tindall, el marido de Zara, tiene una fortuna de $20 millones (18,6 millones de euros).

El exjugador internacional de rugby ha estado en una especie de racha de ganancias durante el último año, habiendo ganado unos $378.000 (351,5 millones de euros) por un anuncio de Domino's Pizza en el Reino Unido que protagonizó junto a su antiguo compañero de equipo James Haskell, y unos $190.000 (176,7 millones de euros) por aparecer en el reality show británico I'm a Celebrity...Get Me Out Of Here! (Soy un famoso... ¡Sácame de aquí!)

La princesa Ana quería una vida lo más normal posible para sus hijos, de ahí su decisión de renunciar a los títulos para ellos. Sin duda, esta ruptura con la tradición les ha favorecido, pues ambos han forjado carreras de gran éxito.

Al igual que su hermana Zara, Peter Phillips tiene una fortuna estimada en $20 millones (18,6 millones de euros). Ha desempeñado varios cargos empresariales de alto nivel y actualmente dirige su propia empresa de gestión deportiva. El miembro de la realeza ha conseguido mantenerse alejado de los escándalos, aunque provocó una pequeña reacción tras aparecer en un anuncio de leche en China, y fue criticado por "ordeñar" sus conexiones reales.

Anteriormente llamado vizconde Linley, David Armstrong-Jones, 2ºConde de Snowdon, ha dicho que el dinero lo mueve. Hijo de la difunta princesa Margarita, dirigió durante años un exitoso negocio de carpintería de alta gama, hasta que finalmente dejó las herramientas en 2022.

Sin embargo, la base de la fortuna del miembro de la realeza, estimada en hasta $39 millones (36,3 millones de euros), es el legado que recibió de su madre y el producto de la venta en 2006 de sus objetos de valor.

Primo hermano de la difunta reina, el príncipe Miguel de Kent pasó un largo periodo en el ejército antes de emprender una carrera empresarial que le ha ayudado a acumular un patrimonio neto estimado en $40 millones (37,2 millones de euros). La vida profesional del príncipe fue en gran medida poco controvertida hasta 2021, cuando fue criticado por sus presuntos estrechos vínculos con el gobierno ruso.

Considerados como miembros de la realeza sin trabajo, el príncipe Miguel y su esposa fueron objeto de críticas en 2002, cuando se supo que pagaban un alquiler ínfimo por su lujoso apartamento del palacio de Kensington. Finalmente, la pareja accedió a pagar el precio del mercado.

El príncipe Harry, que ya no es un miembro activo de la realeza, ha aumentado considerablemente su patrimonio neto desde que se trasladó a EE.UU. en 2020. Antes de "Megxit", su patrimonio consistía principalmente en unos $12,7 millones (11,8 millones de euros) heredados de la herencia de la princesa Diana y $17,8 millones (16,5 millones de euros) dejados en fondos fiduciarios por su bisabuela, la reina madre.

Al parecer, en su reciente 40° cumpleaños, Harry recibió $10 millones (9,3 millones de euros) de este fondo fiduciario, que la Reina Madre creó para distribuir partes de su patrimonio a sus bisnietos en etapas clave de la vida.

Los lucrativos contratos de libros, podcasts y televisión han aumentado aún más la fortuna de Harry, siendo su mansión de Montecito y la de Meghan de $14,7 millones (13,7 millones de euros) su mayor activo. En conjunto, el patrimonio neto de la pareja se estima en $60 millones (55,8 millones de euros).

Se dice que Meghan Markle valía más de $5 millones (4,7 millones de euros) cuando conoció al príncipe Harry, gracias a su papel en la serie de televisión Suits y al blog de estilo de vida The Tig. Como ya se ha dicho, se calcula que la fortuna combinada de la pareja asciende ahora a $60 millones (55,8 millones de euros).

El mayor logro de la pareja desde que dejó de pertenecer a la realeza en 2020 es el acuerdo de $100 millones (93 millones de euros) que firmaron con Netflix a través de su empresa Archewell Productions, pero su contrato de $20 millones (18,6 millones de euros) con Spotify se canceló sin ceremonias el pasado junio.

Las estimaciones más fiables de Internet sitúan el patrimonio neto del príncipe William en $100 millones (93 millones de euros). Además del dinero que le dejaron su madre y su bisabuela, al heredero al trono se le concedió el Ducado de Cornualles a la muerte de su abuela la Reina en 2022, lo que le proporciona unos ingresos anuales de $7,5 millones (7 millones de euros).

El príncipe de Gales también posee una serie de bienes de gran valor, como la gran mansión de Anmer Hall, en Norfolk, que posee con su esposa.

El rey Carlos recibió la mayor parte del patrimonio de la difunta reina completamente libre de impuestos. El pasado mes de abril, The Guardian llevó a cabo lo que denominó el primer análisis forense del patrimonio privado de la monarca. Descubrió palacios, castillos y propiedades por valor de $415 millones (386 millones de euros), incluidos Sandringham y Balmoral, colecciones de arte, coches y sellos de primera clase, joyas opulentas, dinero en efectivo cortesía del Ducado de Lancaster y mucho más.

En total, el análisis sitúa el patrimonio neto del rey en la asombrosa cifra de $2.300 millones (2.100 millones de euros). Dicho esto, la estimación de The Sunday Times Rich List es significativamente inferior: $774 millones (719 millones de euros).

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