10 objetos que usas a diario que antes costaban una FORTUNA
Cosas que damos por sentadas y que antes costaban una fortuna

Es justo decir que muchos y muchas de nosotras damos por sentados aspectos de la vida del siglo XXI: nuestros teléfonos, nuestros ordenadores, nuestros televisores... ¡incluso una taza de té! Pero para muchas personas de décadas y siglos pasados, los productos y servicios de los que disfrutamos hoy eran un lujo que solo podían permitirse los miembros más ricos de la sociedad.
Haz clic o desplázate por la galería para descubrir los objetos cotidianos que antes solo estaban al alcance de las personas más y descubre cuándo se hicieron asequibles para todos los demás.
Todas las cantidades están en dólares estadounidenses, las cifras en euros son conversiones aproximadas que podrían cambiar.
Adaptado al español por Alba Mora Antoja, Redactora en Español para loveMONEY.
Té: Pasó a ser asequible en 1784

El té es una de las bebidas más reconfortantes y, hoy en día, son muchos los que toman una taza a diario. Es también un icono de la cultura británica. Sin embargo, durante la mayor parte del siglo XVIII, el té era un lujo que solo podían permitirse los miembros más ricos de la sociedad. Los elevados impuestos sobre el té importado, un arancel del 119%, provocaron muchos problemas, entre ellos el contrabando de té.
También provocó la Motín del Té de Boston de 1773 (en la foto), una protesta política en la que los colonos estadounidenses, enfurecidos con Gran Bretaña por imponer impuestos exorbitantes, asaltaron un barco mercante antes de arrojar 342 cofres de té importado al puerto.
Té: Pasó a ser asequible en 1784

Las cosas cambiaron cuando Richard Twining (en la foto), de la Twinings Tea Company, convenció al primer ministro británico William Pitt de que reducir los impuestos aumentaría los ingresos del té y acabaría con el contrabando. Como resultado, se aprobó la Ley de Conmutación de 1784, que rebajó los aranceles del té del 119% al 12,5% y puso la bebida al alcance de todos.
En una década, la industria estaba en auge y la bebida se había convertido en un elemento de la vida cotidiana. Hoy en día, el té es la bebida más consumida en el mundo, solo superada por el agua. Según el Index Mundi, el precio medio de un kilo de té es actualmente de solo $2,31 (unos 2,2 €) en Estados Unidos.
Automóviles: Empezaron a ser asequibles en 1908

Aunque ya existían automóviles a finales del siglo XIX y principios del XX, eran ineficaces y caros, y una extravagancia reservada solo a los miembros más ricos de la sociedad. Uno de los pocos automóviles que había en el mercado era el Ford Modelo B, que se fabricó entre 1904 y 1906 y costaba $2.000 de la época. ¿Te parece razonable? Si lo ajustamos a la inflación, son la friolera de $70.000 (unos 65.100 €) en dinero de hoy.
Sin embargo, todo cambió cuando Ford introdujo en el mercado el Modelo T (en la foto) en otoño de 1908. Este se considera el primer coche económico con un precio razonablemente accesible.
Automóviles: Empezaron a ser asequibles en 1908

Su bajo coste estaba justificado porque se fabricaba en serie mediante una cadena de montaje móvil. Los precios oscilaban entre $250 (unos 232,5 €) y $850 (unos 790,5 €), o entre $8.500 (unos 8.094 €) y $29.100 (unos 27.063 €) en dinero de hoy.
Según el sitio web estadounidense de anuncios de coches Edmunds.com, el precio medio de un coche nuevo en Estados Unidos era de $47.388 (unos 44.070 €) a principios de este año. Sin embargo, a diferencia de nuestros antepasados del siglo XX, nosotros al menos podemos permitirnos el lujo de elegir, ya que ahora hay coches diferentes que se adaptan a una amplia gama de presupuestos.
Radios: Pasaron a ser asequibles en la década de 1930

Cuando la gente empezó a comprar radios para sus casas en los años veinte, el precio típico oscilaba entre $120 y $200 (entre 114 € y 190 €). Para los que tenían un presupuesto menor, se podían construir en casa "radios de cristal" más baratas por solo $6 ($94 hoy, unos 87,4 €) utilizando cristal de galena de plomo e hilo metálico fino.
Sin embargo, la calidad del sonido era mala, había frecuentes interrupciones por estática y se necesitaban auriculares. No pasó mucho tiempo antes de que el atractivo de la radio captara la atención del público y se iniciara la producción en serie, lo que abarató considerablemente los costes. A finales de los años veinte, los precios habían bajado a unos mucho más asequibles $35, o $645 (unos 600 €), en dinero de hoy.
Radios: Pasaron a ser asequibles en la década de 1930

Los años treinta fue apodada la "Edad de Oro de la Radio". Se cree que casi la mitad de los hogares estadounidenses tenían una radio, y medio millón de coches estaban equipados con una. Además, el número de emisoras de radio pasó de cinco en 1921 a 612 en 1931, un asombroso aumento del 12.140%.
Si avanzamos hasta hoy, los tiempos y los precios han cambiado radicalmente. El apogeo de la radio hace tiempo que pasó, y otros medios han ocupado su lugar. Mientras tanto, una radio portátil te costará tan solo $10 (unos 9,3 €) en Amazon.
Televisores: Empezaron a ser asequibles en los años 50

Aunque el inventor escocés John Logie Baird empezó a hacer demostraciones de su primer prototipo de televisor a mediados de los años veinte, la primera televisión no llegaría a las estanterías hasta la década siguiente. El RCA TRK-12 fue uno de los primeros televisores que salieron a la venta en Estados Unidos y se pudo comprar por primera vez en 1939.
Sin embargo, tendías que gastarte una pequeña fortuna para tenerlo, ya que el diminuto televisor de 12 pulgadas se vendía inicialmente por $600 (unos 558 €), o unos exorbitantes $13.600 (unos 12.600 €) en dinero de hoy. Las ventas de televisores eran bajas a finales de los años treinta y principios de los cuarenta, y ni siquiera la reducción de los precios ayudó a aumentar las ventas. ¿Por qué? Debido a las turbulencias de la época de la Segunda Guerra Mundial, reinaba la incertidumbre laboral y era difícil disponer de dinero.
Televisores: Empezaron a ser asequibles en los años 50

El negocio de los televisores empezó a florecer en la década de los cincuenta. En 1954, el televisor más asequible era un modelo RCA en blanco y negro de 17 pulgadas que costaba $189 (unos 175,8 €) o $2.215 en dinero de hoy (unos 2.060 €). Aunque seguía siendo caro, muchos hogares estadounidenses lo consideraron una inversión rentable, y al final de la década se habían comprado unos 55 millones de televisores.
Lejos de ser una moda, en 1993 el 98% de los estadounidenses poseía al menos un televisor. Por suerte, los televisores actuales son bastante menos caros. Según Statista, el precio medio mundial de un televisor en 2024 es de $383 (unos 356,2 €), y está previsto que siga bajando en los próximos años.
Aspiradoras: Pasaron a ser asequibles en la década de 1970

Hoy en día, una aspiradora es un elemento básico en la mayoría de los hogares, aunque no siempre fue así. Durante la Segunda Guerra Mundial, la aspiradora se comercializaba para amas de casa de clase media, que necesitaban un saldo bancario considerable para comprarla.
Por ejemplo, en 1937, una Hoover Modelo 150 costaba unos $80. Puede que no parezca mucho, pero en realidad son la friolera de $1.750 (unos 1.627,5 €) en dinero de hoy. Ni que decir tiene que la mayoría de la gente optó por una escoba económica.
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Aspiradoras: Pasaron a ser asequibles en la década de 1970

Sin embargo, la gente no tendría que esperar mucho para que las aspiradoras entraran en la corriente dominante. En 1976, modelos como la aspiradora Singer Deluxe se vendían a un precio mucho más razonable de $69,95 (unos 65,1 €), el equivalente a $388 (unos 370 €) en dinero de 2024.
Hoy en día, la gente puede disfrutar de la comodidad de una aspiradora sin arruinarse. El modelo más vendido en Amazon.com es la aspiradora vertical Shark NV360 Navigator Lift-Away Deluxe, que se vende por $99,95 (unos 93 €).
Volar: Empezó a ser asequible en 1978

Aunque el transporte aéreo comercial había empezado a cobrar impulso en los años veinte, no empezó a despegar realmente hasta la década de los cincuenta. A pesar de ello, más del 80% de los estadounidenses nunca habían viajado en avión en 1958 debido a los elevadísimos precios.
Un billete de ida y vuelta de Boston a Los Ángeles costaba el equivalente en 2024 a $5.280 (unos 5.030 €) en 1941, frente a los escasos $150 (unos 139,5 €) actuales. Aparte del coste, los vuelos también tardaban mucho más. En 1941, por ejemplo, ese mismo vuelo tardaba más de 15 horas e incluía varias escalas, frente a un vuelo directo de seis horas hoy en día.
Volar: Empezó a ser asequible en 1978

En 1978, sin embargo, todo cambió. Antes de ese momento, el gobierno federal regulaba las líneas aéreas en Estados Unidos, controlando las rutas, los horarios, las tarifas y el número de compañías. Las compañías aéreas solo tenían un objetivo en la era posterior a la desregulación: vender billetes. Los precios se redujeron drásticamente mientras las aerolíneas competidoras luchaban por llenar sus plazas. Como resultado, el transporte aéreo se hizo asequible a las masas.
Hoy, viajar en avión es más accesible que nunca. Una encuesta reciente de Airlines for America reveló que el 90% de los estadounidenses había tomado un vuelo comercial en su vida.
Ordenadores personales: Pasaron a ser asequibles en la década de 1980

Ya sea un ordenador de sobremesa doméstico, un portátil o un teléfono móvil, los ordenadores se consideran ahora más o menos una necesidad básica de la vida del siglo XXI. Sin embargo, no te creerás el escandaloso coste del primer ordenador personal.
Cuando llegó a las estanterías en 1957, el IBM 610 (en la foto) costaba $55.000, unos asombrosos $617.000 (unos 574.800 €) en dinero de hoy. Como alternativa, el dispositivo también podía alquilarse por $1.150 al mes, el equivalente a unos $12.900 (unos 12.000 €) en dinero de hoy. Solo se fabricaron 180 unidades debido a su asombroso precio.
Ordenadores personales: Pasaron a ser asequibles en la década de 1980

Dos décadas después, los ordenadores personales seguían siendo caros. En 1977, salió al mercado el primer microordenador fabricado en serie con éxito: el Apple II. Sin embargo, tenía un precio de $1.289, o $6.700 (unos 6.231 €) en dinero de hoy.
Por suerte, tras el lanzamiento del Apple II, no hubo que esperar mucho para conseguir ordenadores personales más asequibles. El Sinclair ZX80 (en la foto) salió a la venta en 1980. Con un precio de $536 en dinero de hoy (unos 498,5 €) por una versión ya construida, fue uno de los primeros ordenadores que se vendieron a un precio tan asequible.
Teléfonos móviles: Pasaron a ser asequibles en 1999

El primer teléfono móvil fue inventado antes de lo que imaginas: en 1973, por el ingeniero de Motorola Martin Cooper y el diseñador Rudy Krolopp (en la foto). El voluminoso DynaTAC 8000X pesaba la friolera de 0,9 kg y solo permitía 30 minutos de conversación antes de necesitar 10 horas para recargarse. A pesar de ello, el aparato tenía un precio de $3.995, unos $12.100 (unos 11.253 €) en dinero de hoy, cuando salió a la venta en 1984.
A pesar de la revolucionaria invención de Cooper, la industria de la telefonía móvil no cobró un impulso serio hasta los noventa. Debido al elevado coste de los aparatos, durante la mayor parte de la década estuvieron reservados a los profesionales de los negocios o a los ultrarricos.
Teléfonos móviles: Pasaron a ser asequibles en 1999

Todo cambió cuando el Nokia 3210 llegó a las estanterías en 1999. Nokia llevaba años fabricando teléfonos móviles, pero su modelo 3210 fue el primero que consiguió la fórmula ganadora de precio asequible, tamaño razonable y funcionalidad imprescindible. Además de atraer al mercado general, también fue el primer teléfono móvil en tener una antena totalmente interna, e incluía el imprescindible juego Snake.
Un año después, salió a la venta su sucesor, el Nokia 3310 (en la foto), con un precio de unos $160 (unos 149 €), o $293 (unos 272 €) hoy en día. Más elegante y compacto, el 3310 ha vendido más de 126 millones de unidades desde su lanzamiento y sigue siendo uno de los teléfonos móviles más vendidos de todos los tiempos. Cuando el primer iPhone llegó a las estanterías en 2007, la industria se reinventó de nuevo. Sin embargo, fue el lanzamiento del Nokia 3310 lo que introdujo por primera vez los móviles en la corriente dominante.
Cámaras digitales: Pasaron a ser asequibles en la década de 2000

La primera cámara digital fue inventada en 1975 por Steve Sasson, un ingeniero de Kodak. Su prototipo tenía el tamaño de una panera y tardaba unos tediosos 23 segundos en capturar una sola imagen. A pesar de la admirable innovación de Sasson, nunca llegó a comercializarse. La primera cámara digital que salió realmente a la venta fue la Kodak DCS 100 (en la foto) en 1991.
La cámara tenía un precio de $20.000, o lo que es lo mismo, $46.300 (unos 43.100 €) en moneda actual. Dirigido a profesionales, el dispositivo requería un componente externo de almacenamiento de datos que el fotógrafo tenía que llevar en bandolera y conectar por cable a la cámara. Debido a su coste, solo se vendieron 987 unidades entre 1991 y 1994.
Cámaras digitales: Pasaron a ser asequibles en la década de 2000

Las cámaras digitales se abarataron sustancialmente cuando Apple hizo debutar su cámara QuickTake (en la foto) en 1994, con un precio de $749 (unos 696,6 €) en dinero de hoy. A medida que avanzaba la década, las cámaras digitales se hicieron gradualmente más asequibles. En 2007, el primer iPhone salió al mercado por $499 (unos $758 en dinero de hoy, unos 705,9 €), revolucionando la cámara digital para siempre.
Hoy, gracias a nuestros teléfonos inteligentes, tenemos cámaras digitales de alta calidad que nos caben en el bolsillo. Y es evidente que nos encanta usarlas. Según la empresa de marketing digital Omnicore, cada día se comparten en Instagram la friolera de 1.300 millones de fotos.
Impresoras láser: Pasaron a ser asequibles en la década de 2000

Antes de 1984, la mayoría de las impresoras del mercado eran ruidosas e imprimían con poca resolución. La empresa informática HP llevaba colaborando con Canon en la tecnología de impresoras láser desde los años setenta. Con el auge de los ordenadores personales en los años 80, la empresa decidió implementar la tecnología punta en sus impresoras.
Como resultado, la impresora LaserJet de HP (en la foto) fue la primera impresora láser de sobremesa creada para ordenadores personales. Cuando se lanzó por primera vez en 1984, costaba $3.500, o unos asombrosos $10.600 (unos 9.900 €) en dinero de hoy. Gracias a su capacidad para producir rápidamente impresiones de alta calidad casi en silencio, no había otra impresora igual en el mercado, y podía alcanzar un precio elevado.
Impresoras láser: Pasaron a ser asequibles en la década de 2000

La LaserJet IIP se lanzó en 1990 a $1.495, unos $3.600 (unos 3.348 €) en dinero de hoy. Pero a lo largo de la década, el coste de las impresoras láser siguió bajando. De hecho, se hicieron tan accesibles al gran público que HP celebró el envío de su impresora LaserJet número 50 millones en diciembre de 2000.
La máquina se convirtió en un elemento básico tanto en el hogar como en la oficina. Afortunadamente, las impresoras láser son ahora mucho más asequibles que hace décadas. Puedes encargar una en el sitio web de HP por tan solo $120 (unos 112 €).
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