Puede que los antiguos propietarios de las increíbles casas de esta lista consiguieran amasar una increíble fortuna. Sin embargo, no pudieron mantenerse al día con sus deudas acumuladas. Debido a los crecientes gastos de mantenimiento e hipoteca, costosas batallas legales y negocios en quiebra, se vieron obligados a entregar algunas de las casas más opulentas del planeta.

Sigue leyendo para descubrir la historia de estas magníficas mansiones y cómo fueron embargadas cuando sus propietarios pasaron de ser superricos a tocar fondo...

Adaptado al español por Alba Mora Antoja, Redactora en Español para loveMONEY.

A pesar de haber amasado una fortuna de $150 millones (144 millones de euros) en su día, el actor estadounidense Nicolas Cage se ha metido en varios problemas financieros a lo largo de los años. En un momento dado, la estrella poseía 15 casas. Sin embargo, los elevados impuestos, junto con el colapso del mercado inmobiliario a finales de la década de los 2000, provocaron el embargo de varias de sus casas.

Entre ellas, se encontraba la Mansión LaLaurie en Nueva Orleans, Luisiana. Al no poder pagar a sus acreedores y Hacienda, la histórica casa fue embargada en 2009.

La propiedad que Cage tenía en el emblemático edificio de Nueva Orleans le duró relativamente poco. El actor compró la casa en 2006 por $3,4 millones (3,3 millones de euros), solo tres años antes de perderla.

La mansión de estilo imperio que vemos hoy en día se construyó en 1838 en el mismo lugar donde en su día había una casa de estilo federal que había sufrido un incendio cuatro años antes. El edificio se había reinventado en numerosas ocasiones antes de que Cage lo comprara, sirviendo como conservatorio de música en la década de 1880 y como refugio para hombres en situación de pobreza en los años veinte.

Cuando Cage dejó de vivir en la mansión, el operador de energía Michael Whalen compró la casa por $2,1 millones (2 millones de euros) en 2010. Además, invirtió algo menos de $4 millones (3,8 millones de euros) en renovarla. Casi 15 años después, en julio de 2024, Whalen puso la mansión a la venta por algo más de $10,2 millones (9,8 millones de euros).

Gibran Nassif, fundador de Nassif Media, recorrió la casa cuando estaba a la venta y documentó sus renovados interiores en su canal de YouTube.

La extensa casa histórica abarca 930 metros cuadrados y ofrece ocho dormitorios y diez baños. La mansión principal de tres pisos incluye un gran comedor, una espectacular cocina con armarios negros, una sala de billar y una suite para invitados, junto con dos apartamentos independientes. Uno de los aspectos más destacados de la casa es el vasto balcón que envuelve el edificio, que ofrece vistas espectaculares de Nueva Orleans.

Una de las reformas que Whalen hizo en la casa fue la instalación de un bar clandestino secreto. Se accede al espacio oculto a través de una puerta escondida detrás de un espejo en el dormitorio principal.

A pesar de su precio de $10,2 millones (9,8 millones de euros), Whalen vendió la Mansión LaLaurie por un precio algo inferior, de $6 millones (5,8 millones de euros), en octubre de 2024, según el periódico de Luisiana New Orleans CityBusiness. Aquello marcó un nuevo capítulo para la propiedad.

El exgobernador de Dakota del Sur, Mike Rounds, en la foto de la derecha, fue el último funcionario en residir en la Mansión del Gobernador del estado en Pierre. Construida en 1936, la casa ha alojado a 16 gobernadores de Dakota del Sur a lo largo de las décadas. Cuando asumió el cargo en 2003, Rounds se mudó allí durante un total de tres meses antes de regresar a su casa familiar debido al mal estado de la propiedad y a las instalaciones básicas de fontanería y electricidad.

En el mismo lugar, se encargó una nueva mansión del gobernador que duplicaba el tamaño, y la estructura anterior fue reubicada. Sin embargo, la vieja mansión asediada le costaría muy caro a uno de sus futuros propietarios.

La propiedad tardó un tiempo en encontrar un nuevo hogar. Dividida en tres partes, permaneció en un almacén durante tres años antes de ser subastada finalmente por $36.500 (35.096 €), el equivalente a $58.625 (56.370 €) en la actualidad. Comprada inicialmente como un albergue de camping, su nuevo propietario, Rod Woodruff, decidió vender la casa a su amigo, el dentista local Leon Brodie, que quería restaurarla.

Además del precio de compra, que era algo superior a lo que Woodruff había pagado originalmente, Brodie gastó $400.000 (384.615 €), unos $622.400 (598.462 €) en dinero actual, para trasladar la casa pieza por pieza en 2006 a un emplazamiento en Rapid City, una ciudad al oeste del estado.

La mansión se convirtió en un proyecto apasionante para Brodie y su esposa, Edith. Gastaron $3 millones (2,9 millones de euros), algo más de $4,5 millones (4,3 millones de euros) en la actualidad, en renovar la casa a lo largo de un año, transformándola en un gran lugar para eventos.

Con una superficie de 650 metros cuadrados y 18 habitaciones, la casa fue objeto de una majestuosa renovación, desde la elegante escalera hasta las impresionantes lámparas de toda la casa. La pareja equipó la cocina con electrodomésticos de calidad comercial, ideales para celebrar grandes fiestas y bodas.

Las amplias salas de recepción de la casa, una de las cuales se muestra en la foto, eran perfectas para celebrar eventos. Mientras tanto, las ampliaciones de los terrenos, que incluían un camino de entrada circular, plazas de aparcamiento adicionales, patios de ladrillo con hogueras y una gran losa de hormigón para una carpa, ayudaron al negocio.

Aunque el negocio fue bueno durante un tiempo, las cosas cambiaron para Brodie y los crecientes costes le alcanzaron. Según el periódico local de Dakota del Sur The Mitchell Daily Republic, los impuestos de la casa subían hasta $12.000 (11.538 €) al año, mientras que las facturas mensuales de electricidad oscilaban entre $600 (577 €) y $700 (673 €).

¿Te gusta este contenido? Haz clic en ‘Me gusta’ arriba a la izquierda y en ‘Seguir’ para descubrir más historias como esta en loveMONEY.

Algunas de las características más inusuales de la casa son los molinos de viento y el Stonehenge en miniatura que flanquean el estanque en el terreno de 7 hectáreas.

Brodie tenía una deuda de $500.000 (480.769 €) con el banco cuando ejecutaron la hipoteca de la casa. La mansión del antiguo gobernador estuvo en el mercado durante meses antes de subastarse en agosto de 2013. Sin embargo, no alcanzó el precio mínimo de venta. La puja ganadora fue de $410.000 (394.231 €), la misma cantidad que le costó a Brodie trasladar la estructura menos de 10 años antes.

El capitalista de riesgo alemán Thomas Kramer es conocido por su remodelación de South Beach, en Miami, así como por su extravagante estilo de vida. Sin embargo, sus compras inmobiliarias le llevaron a una prolongada batalla judicial que finalmente le costó su lujosa casa.

En los años noventa, Kramer compró bienes inmuebles en South Beach con dinero del padrastro de su exmujer, el difunto Siegfried Otto, cuya familia era propietaria de una de las mayores empresas de impresión de billetes de Alemania. Los herederos de Otto llevaron a Kramer a los tribunales en Suiza, alegando que el dinero era un préstamo, mientras que Kramer afirmó que era un regalo. En 2003, los tribunales fallaron a favor de los herederos. La sentencia de $192 millones (185 millones de euros) se ejecutó en Estados Unidos en 2017, lo que provocó el embargo de la vivienda principal de Kramer.

La querida antigua mansión de Kramer se encuentra en la exclusiva Star Island de Miami, justo frente a la costa de South Beach. Se dice que pagó $2 millones (1,9 millones de euros) por la primera parcela en 1992, que hoy en día valdría unos $4,5 millones (4,3 millones de euros). También dicen que pagó algo más de $3,8 millones (3,7 millones de euros) por la segunda parcela en 1996, lo que equivaldría a $7,6 millones (7,3 millones de euros) en 2025.

A lo largo de los años, en la casa de estilo renacentista mediterráneo, se celebraron numerosas y elaboradas fiestas a las que asistieron un montón de magnates de los negocios y famosos, incluidas las hermanas Paris y Nicky Hilton.

Estas fotos del interior se tomaron en 2018, cuando la mansión había sido reclamada por los acreedores de Kramer y estaba a la espera de subasta.

La extensa finca tiene un total de 1.580 metros cuadrados de espacio habitable en varios edificios. Hay 13 dormitorios y 12 baños, además de una sala de cine, piscina, spa, gimnasio y un amplio garaje con capacidad para 14 supercoches. En el resto de las 0,75 hectáreas de terreno, hay dos muelles para amarrar barcos en la bahía de Biscayne, además de una rampa para motos acuáticas.

En la foto, se muestra el gimnasio de última generación de la casa. Al igual que otras zonas de la mansión, está decorado en rojo y negro y presenta matices góticos, como las puertas arqueadas con vidrieras y el espectacular mural del techo.

Algunos de los contenidos más inusuales de la casa, como un velociraptor de tamaño real, una escultura de un rinoceronte y una estatua de un monje, fueron subastados en febrero de 2018 por la Oficina del Sheriff del Condado de Miami-Dade.

Este espacio de reuniones relativamente utilitario parece haber sido el centro de operaciones de Kramer para su empresa de desarrollo inmobiliario y su trabajo de capitalista de riesgo.

Después de que fuera embargada, la finca se vendió finalmente por $33 millones (31,7 millones de euros) en 2018 en una subasta, unos $7 millones (6,7 millones de euros) menos que su precio de salida inicial.

La Casa Casuarina, que fue la residencia privada de uno de los diseñadores de moda más famosos del mundo, tiene una historia tan elaborada como sus interiores. También conocida como la "Mansión Versace", la propiedad de 2.136 metros cuadrados adorna el Ocean Drive de Miami, una calle repleto de estrellas.

Sin embargo, su propietario, el empresario de telecomunicaciones Peter Loftin (en el extremo derecho de la foto), se vio obligado a subastar el emblemático edificio en 2013 después de que su empresa se acogiera al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras.

Entonces, ¿cómo es que Casa Casuarina se encontró a merced del mejor postor?

Construida en 1930 por el arquitecto y heredero petrolero Alden Freeman, la increíble mansión se inspiró en el Alcázar de Colón, un palacio colonial en la República Dominicana donde residió la familia de Cristóbal Colón a principios del siglo XVI.

Sin embargo, la propiedad solo ganó su estatus cuando Gianni Versace se topó con ella más de 60 años después.

Tras unas reformas valoradas en $33 millones (31,7 millones de euros), Versace encargó una nueva y grandiosa ala sur, un jardín de mosaicos y una deslumbrante piscina de 16 metros de largo revestida de oro de 24 quilates. Trágicamente, en 1997, el diseñador fue asesinado en las escaleras de su amada casa.

A principios de 2000, Loftin compró la mansión por $19 millones (18,3 millones de euros) y en 2009, el hotelero Barton G. Weiss la alquiló.

En diciembre de 2011, el titular de la hipoteca, VM South Beach LLC, presentó una demanda federal de ejecución de hipoteca sobre la vivienda, alegando que Peter Loftin había incumplido el pago de una nota hipotecaria de $25 millones (24 millones de euros), según la revista Forbes.

Loftin se opuso más tarde a la demanda, alegando múltiples cargos de fraude. Un administrador concursal también reclamó la propiedad, ya que un accionista minoritario había sido condenado por llevar a cabo una estafa piramidal de $1.200 millones (1.170 millones de euros).

En julio de 2013, un tribunal de quiebras de Estados Unidos aprobó la venta de la mansión y fue declarada "la propiedad más singular que se haya vendido en una subasta".

A pesar de sus amplias escaleras, sus esculturas únicas y sus paredes pintadas a mano, el precio de venta de la mansión bajó de $125 millones (120 millones de euros) a $75 millones (72,1 millones de euros). La propiedad fue finalmente vendida a VM South Beach LLC por solo $41,5 millones (39,9 millones de euros).

La mansión "The One" fue embargada por el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles en septiembre de 2021. Apodada "la propiedad urbana más grande y cara del mundo", se trataba de un apasionante proyecto de $500 millones (481 millones de euros) de Nile Niami, productor convertido en promotor.

Con más de $200 millones (192 millones de euros) de deuda adjunta a la propiedad, la mansión de 9.754 metros cuadrados se subastó por solo $141 millones (136 millones de euros), menos de la mitad de los $295 millones (284 millones de euros) del precio de venta.

Diseñada por el renombrado arquitecto Paul McClean, la extensa casa en la cima de una colina está situada en el prestigioso barrio de Bel Air en Los Ángeles, California.

Incumplió el pago de más de $165 millones (159 millones de euros) en préstamos utilizados para financiar el proyecto. Luego, según documentos judiciales obtenidos por el medio estadounidense CNBC, Nile Niami's LLC, Crestlloyd, se declaró en quiebra, y la finca de 21 dormitorios y 49 baños entró en administración judicial.

Varios de los acreedores de The One, que podían perder dinero, se opusieron al bajo resultado de la subasta, culpando a la falta de un certificado de ocupación y a la guerra en Ucrania de ahuyentar a los posibles postores.

Sin embargo, los medios informaron de que partes interesadas de Oriente Medio y Asia habían recorrido la enorme mansión, probablemente atraídas por su interminable lista de lujosas comodidades. Entre ellas, había un cine de 50 butacas, un spa, una bolera de cuatro pistas e incluso un club nocturno.

Por el contrario, el mayor acreedor de la emblemática propiedad, Don Hankey, con $132 millones (127 millones de euros) en reclamaciones, apoyó el mediocre resultado, junto con Chad Roffers, presidente de Concierge Auctions, que vendió el monolito de Niami.

El día de la subasta, en marzo de 2022, la puja ganadora fue la de Richard Saghian, fundador de la línea de ropa Fashion Nova.

A pesar del déficit en el precio de venta, The One sigue batiendo el récord de una casa vendida en una subasta en Estados Unidos. Anteriormente, pertenecía a la finca Beverly, que se subastó por $63 millones (60,6 millones de euros) en 2021.

En las imágenes compartidas por TopTenRealEstateDeals.com, la nueva casa de Saghian ofrece lujosas características que incluyen un garaje subterráneo para 50 coches, varias piscinas, un espacio para golf y una terraza en la azotea.

El Dr. Alex Khadavi, el difunto cirujano plástico de las estrellas, diseñó y encargó una espectacular casa en Bel Air, en las colinas. Sin embargo, cuando la casa estuvo terminada, Khadavi estaba endeudado y debía decenas de millones a sus acreedores. Dos semanas después de poner la propiedad en el mercado en 2021, se declaró en bancarrota.

Al no encontrar comprador, la mansión se subastó en 2022. Aunque se puso a la venta por $87,8 millones (84,4 millones de euros), la puja ganadora fue de apenas $45,8 millones (44 millones de euros).

La casa palaciega tiene 1.950 metros cuadrados de espacio habitable, que incluyen siete dormitorios, once baños, una sala de degustación de champán y un home cinema.

Los extravagantes acabados de mármol de la propiedad cuestan unos $7 millones (6,7 millones de euros), mientras que el polvo de oro de 24 quilates incrustado en los suelos convierte esta casa única en la cúspide absoluta de la opulencia.

En la gran entrada de la casa, un puente de mármol flotante conduce a una imponente puerta de acero que se abre para revelar unas vistas impresionantes.

La entrada de doble altura está revestida de blanco de suelo a techo, con un puente revestido de vidrio que flota por encima. Una característica particularmente inusual del espacio es la plataforma que se eleva desde el suelo, creando una mesa elevada para un/a DJ.

Ray Parisi, del medio estadounidense CNBC, recorrió la casa con el agente inmobiliario Arran Kirman cuando se puso a la venta por primera vez en 2021. Los dos aparecen en la foto en la lujosa sala de cine, que cuenta con asientos en gradas y paredes insonorizadas.

El interior es el colmo de la vida lujosa y futurista. Uno de los aspectos más destacados es la galería multisensorial NFT, única en su género, que alberga arte digital e incluye siete pantallas multimedia y un proyector láser giratorio. También hay un museo del automóvil revestido de mármol negro para guardar los preciados supercoches.

En el exterior, las llamativas comodidades continúan. Hay una piscina semicircular de borde infinito que sobresale sobre el valle, ofreciendo increíbles vistas del horizonte de Los Ángeles. En otra parte, se ha construido un ascensor de cristal alrededor de un estanque de carpas al aire libre, lo que permite a los residentes navegar por los niveles de la casa con estilo.

Por supuesto, toda esta grandeza tiene un precio. El precio de la construcción se disparó a más de $46 millones (44,2 millones de euros), lo que obligó a Khadavi a vender la casa en la que una vez pensó vivir para pagar a sus acreedores.

La Mansión Beverly, en el enclave de Beverly Hills, en Los Ángeles, es una de las más emblemáticas de California. La casa, que en su día fue el centro de reunión de algunas de las élites más ilustres de Estados Unidos, acogió a John y Jackie Kennedy durante su luna de miel en 1953 y más tarde se utilizó como escenario de la icónica película de Marlon Brando El padrino (en la foto).

Sin embargo, el antiguo propietario de esta pieza de la historia de la Edad de Oro de Hollywood perdió la magnífica mansión tras caer en dificultades financieras.

El inversor inmobiliario Leonard Ross compró la mansión en la década de los setenta. Sin embargo, Ross se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras en 2019, debido a la enorme cantidad de $75 millones (72,1 millones de euros) de deuda, según el medio Gulf News.

Anteriormente, en 2018, había intentado vender la propiedad por $135 millones (130 millones de euros). Más tarde, se vio envuelto en una batalla legal con los prestamistas hipotecarios.

Construida originalmente en 1925 por el arquitecto Gordon Kaufman, una figura clave en la construcción de la presa Hoover, la impresionante propiedad está llena de elementos de época que se suman a su encanto histórico.

Esta extraordinaria habitación incluye un techo abovedado ornamentado con artesonado de madera decorativo y vidrieras, que ejemplifican la influencia italiana y española de la casa.

Estas imágenes fueron capturadas por el fotógrafo Jim Bartsch y compartidas con TopTenRealEstateDeals.com cuando la casa estaba en el mercado.

La casa principal, en forma de “H”, recibe a los invitados con un enorme vestíbulo de entrada de 15 metros. La planta consta de 19 dormitorios, 29 baños, dos salas de proyección, dos comedores, salas de recepción, una sala de billar y una hermosa biblioteca de dos pisos.

En el exterior, encontrarás un comedor adicional con capacidad para 400 personas, así como una casa de invitados, dos pistas de tenis, una piscina y una casita de piscina.

Los amplios y cuidados jardines se extienden a lo largo de una hectárea e incluyen una serie de elementos acuáticos, espacios de entretenimiento y arcos arquitectónicos, un impresionante telón de fondo para eventos. De hecho, Ross renovó la casa en la década de los noventa con la intención expresa de alquilarla para eventos, con la esperanza de que la finca se volviera autosuficiente. Por mala suerte, esta fuente de ingresos no se materializó.

En septiembre de 2021, la mansión se vendió en una subasta al inversor multimillonario Nicolas Berggruen por $63,1 millones (60,7 millones de euros), menos de la mitad del precio por el que Ross intentó venderla originalmente en 2018.

El rapero, actor y productor estadounidense 50 Cent compró una gran finca en Farmington, Connecticut, en 2003 por $4,1 millones (3,9 millones de euros), el equivalente a $7 millones (6,7 millones de euros) en la actualidad. Poco sabía él que la propiedad tenía una larga lista de antiguos propietarios que habían acabado en dificultades financieras.

La casa fue construida originalmente en 1985 para el fundador de Colonial Realty, Benjamin Sisti, quien fue a prisión por fraude de bancarrota poco más de una década después. Sisti vendió la casa al empresario lituano Romas Martsinkiavitchous, quien también se enfrentó a la bancarrota. Después, la mansión fue comprada por el exboxeador Mike Tyson.

Tyson gastó millones en renovaciones e intentó deshacerse de la propiedad menos de un año después, cuando él también se declaró en quiebra. Finalmente, vendió la casa al rapero estadounidense 50 Cent.

Obstaculizado por problemas legales, 50 Cent hizo lo mismo y se declaró en quiebra en 2015. Aunque había intentado apuntalar sus tambaleantes finanzas poniendo la propiedad en el mercado por $18,5 millones (17,8 millones de euros) en 2007, unos $28 millones (26,9 millones de euros) en dinero actual, no fue hasta 2019 que la desafortunada propiedad finalmente se vendió por solo $2,9 millones (2,8 millones de euros), un recorte de precio del 84%.

Sin embargo, no es difícil ver por qué la enorme finca tuvo dificultades para conseguir un comprador, ni por qué ha llevado a la quiebra a cada uno de sus sucesivos propietarios. Con 4.645 metros cuadrados de superficie habitable, 21 dormitorios y 25 baños, la propiedad es una de las residencias privadas más grandes de Estados Unidos.

Costaba $108,000 (103.846 €) al mes en mantenimiento, incluyendo $5.000 (4.808 €) solo en jardinería, según revelaron los documentos judiciales cuando el rapero se declaró en bancarrota.

Con innumerables lujosas comodidades, la propiedad se parece más a un hotel que a una casa. Además de sus numerosas habitaciones, la mansión incluye una serie de opulentas adiciones cortesía de sus dos propietarios más recientes, que incluyen una piscina cubierta y un jacuzzi, una discoteca, una cancha de baloncesto cubierta del tamaño de la NBA, múltiples salas de juegos, una sala de pantalla verde, un estudio de grabación y una sala de cine.

El medio estadounidense NBC Connecticut hizo un recorrido por el interior poco después de que el empresario y restaurador en serie de Florida Casey Askar se lo comprara a 50 Cent.

La casa se encuentra en un terreno de 6 hectáreas de hermosos bosques, que incluyen un tranquilo estanque y una casa de invitados independiente. En toda la superficie, se encuentran más comodidades, como una segunda cancha de baloncesto al aire libre con el logotipo de G-Unit, una plataforma para helicópteros y una piscina infinita.

Esperamos que la familia Askar tenga más suerte que sus anteriores propietarios a la hora de conservar la finca.

¿Te gusta? Haz clic en ‘Me gusta’ arriba a la izquierda y en ‘Seguir’ para descubrir más historias como esta en loveMONEY.