Nada nos gusta más que visitar casas bonitas, pero ninguna residencia corriente puede competir con estos edificios tan brillantemente disparatados de toda Europa. Desde una casa multicolor con forma de caracol en Bulgaria, hasta una casa típica británica normal con un "adorno" en el tejado de lo más extraño, ¡te garantizamos que te harán mirar dos veces!

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Adaptado al español por Sara Piquer Martí, Editora en Español para loveMONEY.

Enclavado en el barrio de Simeonovo de Sofía (Bulgaria), este edificio verdaderamente disparatado destaca como un pulgar dolorido sobre un manto de casas por lo demás corrientes.

El gigantesco caracol está pintado en un caleidoscopio de tonos y su acabado es realmente psicodélico.

La distintiva residencia tiene cinco plantas y ni una sola pared recta o esquina. Por delante, el caracol presenta una cara caída, dos antenas y un cuerpo rayado. Desde el lateral, puedes ver todo el contorno del edificio, que se ondula para crear la forma de la concha del caracol.

Incluso hay un remolino gigante en la parte trasera, pintado en todos los tonos imaginables. Si te fijas bien, también verás unas pequeñas estatuas de caracoles que decoran la acera delante de la propiedad.

Entonces, ¿qué es la Casa del Caracol? Pues fue diseñada por el arquitecto Simeon Simeonov como una residencia única, y todos los componentes esenciales del edificio forman parte de su decoración. Por ejemplo, la puerta principal está pintada como una boca, mientras que una gran abeja amarilla en la espalda del caracol es en realidad una chimenea. Los ojos y los párpados incluso proporcionan aire fresco y ventilación.

Sorprendentemente, la estructura se construyó con materiales ligeros y ecológicos, lo que la hace energéticamente eficiente y sostenible. Aunque no está abierto al público, puedes explorar el edificio desde el exterior.

¿Habías visto alguna vez algo así? A caballo entre el río Ardle y Ballintuim (Escocia), la Casa del Puente parece sacada de una película de Disney, ¡solo que es real!

Esta insólita propiedad se construyó sobre un puente que cruza el río en 1881 y desde entonces ha hipnotizado a quienes han tenido la suerte de contemplarla en persona.

Según el Archivo de Mount Blair, el edificio fue construido por el pintor y arquitecto escocés Patrick Allen Fraser, y las obras comenzaron en 1870. La propiedad formaba parte del castillo de Blackcraig, que Fraser empezó a remodelar a partir de una casa en 1852.

Casi demasiado surrealista para ser verdad, la Casa del Puente tiene una base hueca, bajo la cual aún fluye el río. Hoy, ¡es un Airbnb catalogado con la categoría A!

En cuanto al interior, la casa cuenta con espacios acogedores y románticos. También hay un montón de encantadoras características originales, como escaleras de caracol de piedra, paredes revestidas de madera tradicional escocesa, suelos de piedra y pino e incluso un retrete (eso es un cuarto de baño) directamente sobre el río. ¿Qué te parece?

Puede que tardes unos segundos en asimilar por completo esta propiedad alucinante. Conocida como Casa do Penedo, que literalmente significa "Casa de los cantos rodados", está encajonada entre cuatro rocas, que forman sus paredes, suelos y techos.

Apodada la "Casa de los Picapiedra", la residencia se encuentra en el municipio portugués de Fafe y fue construida en 1974 por la familia Rodrigues.

Según Idealista, la familia estaba de excursión en la montaña un día de lluvia y, tras pasar horas refugiándose en el coche, decidieron que a la montaña le vendría bien un refugio.

Tras algunas negociaciones, pudieron comprar el terreno. Luego contrataron a un equipo para construir la casa, un proyecto que duró un año. Querían crear un lugar donde pudieran pasar los fines de semana o las vacaciones y estar inmersos en la naturaleza, sin estropear el paisaje circundante, de ahí la decisión de construir la casa dentro de las propias rocas.

La propiedad se construyó sin ninguna tecnología moderna, incluida la electricidad, por lo que no dispone de iluminación, Internet ni televisión. Lamentablemente, no podemos entrar, pero la casa de dos plantas dispone, según se informa, de una pequeña sala de estar y cocina, así como de una zona para dormir en el piso de arriba.

La Casa do Penedo llamó mucho la atención y muchos turistas querían visitarla, así que la familia Rodrigues decidió abrirla a los visitantes. Siguen utilizándola como casa de vacaciones siempre que pueden, pero tuvieron que instalar ventanas blindadas para disuadir a vándalos e intrusos.

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Cuando el carpintero Eric Wasser decidió construir su propia casa en Cosswiller, Francia, tiró el libro de reglas.

En lugar de diseñar una residencia rectangular o cuadrada con cuatro paredes exteriores y un tejado, optó por crear una casa inspirada en un ovni que pudiera aprovechar la energía del sol.

Wasser llamó a la residencia el Heliodomo y la construyó en un ángulo cuidadosamente calculado, para mantener fresco el interior durante los meses de verano. En invierno, cuando el sol está más bajo en el horizonte, la casa capta suficiente luz solar para calentar las habitaciones y mantenerlas a temperatura ambiente.

Un lado de la casa está cubierto de tejas de madera, mientras que la parte inferior está decorada con docenas de paneles de cristal. Algunos dicen que la vivienda se parece a un reloj de sol, mientras que otros la asemejan a una nave espacial.

El interior, de 2.153 pies cuadrados (unos 200 m2), está magníficamente construido, y Wasser demuestra sus increíbles habilidades como carpintero. Desde el techo de madera vista de la casa hasta la magnífica escalera y el mobiliario, cada habitación se beneficia de detalles hechos a mano que hacen que el interior sea tan emocionante como el exterior.Éste fue el primer Heliodomo construido por Eric Wasser en 2009 y el edificio arquetipo pasó a servir de hogar y laboratorio, donde fue estudiado durante varios años por el equipo de Helio Concept. Hoy puedes comprar tu propio Heliodomo.

Escondida dentro de un pequeño bosquecillo de bambú en las afueras de Roma, esta intrigante y curiosa casa no se parece a ninguna que hayamos visto antes. Acertadamente llamada La Casa de Bambú, la propiedad fue concebida como una escultura habitable y construida por su propietario, Alessandro, utilizando troncos de los árboles de su jardín.

Rodeada de plantas de bambú, el exterior de la casa está decorado con botellas de cristal rojas y azules, que actúan como vidrieras, añadiendo a la casa una estética estrafalaria.

Pero es el interior de la casa lo que te dejará perplejo. Casi todas las habitaciones están equipadas con brotes de bambú de imitación, que parecen haber crecido del suelo y se curvan sobre las paredes y los techos, algunos de los cuales son de cristal.

Ésta es la sala de estar, que cuenta con una pequeña cocina, un comedor y una zona de estar. Incluso el suelo tiene raíces de bambú falsas.

Hay un dormitorio en la propiedad y es realmente extraño. De nuevo, tiene brotes de bambú, así como un techo de forma orgánica y una gran claraboya hecha a mano, decorada con azulejos de mosaico de vidrio, que dispersan luz de colores por la habitación.

Incluso el cuarto de baño tiene brotes de bambú, que parecen sostener el tocador y se cuelan en la ducha. Si te apetece sumergirte en un bosque de bambú, puedes alquilar esta peculiar residencia a través de Airbnb.

El artista español Francisco González Grajera comenzó un elaborado proyecto para construir una casa de campo para él y su familia en 1988.

Inspirado por las obras del arquitecto catalán Antoni Gaudí -conocido por la Sagrada Familia y la Casa Milà de Barcelona-, Francisco quería construir algo inesperado y memorable, y estamos seguros de que estarás de acuerdo en que lo consiguió cuando diseñó El Capricho de Cotrina.

Situada en Los Santos de Maimona, en la provincia española de Badajoz, la villa de estilo castillo fue construida a mano y se define por su forma orgánica, sus bonitas torrecillas, sus elaborados mosaicos y sus agujas que recuerdan las puntas de una corona. Los mandatos municipales obligaron a Francisco a interrumpir la construcción varias veces, a veces durante años. Como era de esperar, la caprichosa obra de arte viviente de Francisco no obedecía los códigos de construcción locales y no obtuvo la autorización urbanística para la casa.

Por suerte para nosotros, el artista no se vio obligado a demoler la casa y en 2011 se eligió una nueva administración. Dieron luz verde a Franciso para terminar el trabajo.

Además de completar los componentes existentes de la casa y añadir otros nuevos, también se ocupó de los jardines circundantes, que ahora cuentan con esculturas de árboles de imitación, patios de mosaico y otros detalles extravagantes. En la actualidad, la propiedad funciona como museo y estamos seguros de que sería una excursión fascinante.

La región rumana de Transilvania es sinónimo de leyendas urbanas y oscuros cuentos de hadas, así que puede que no te sorprenda saber que la zona alberga algunas casas realmente peculiares.

Inspirada en un objeto corriente, la Casa de la Guitarra se encuentra en la ciudad de Râșnov y fue diseñada para ofrecer a los huéspedes de Airbnb un alojamiento confortable, además de una experiencia extraordinaria.

Desde la parte delantera de la casa, parece que se ha colocado una guitarra gigante sobre la hierba, mientras que la parte trasera se parece más a una casa, con una terraza de entrada y ventanas.

Está hecha a mano y tiene de todo, desde un largo mástil y diapasón hasta cuerdas, y su boca de resonancia actúa como una gran ventana circular. Vayamos al interior...

Diseñada para cuatro huéspedes, cuenta con una acogedora zona de estar, cocina y comedor en la planta baja, y dos dormitorios lofts en la superior. El tema de la guitarra continúa en el interior, con el techo decorado con madera y vigas que parecen el mástil y los trastes de una guitarra.

Este peculiar Airbnb está disponible para alquilarlo cuando quieras.

A primera vista, es difícil entender qué es exactamente esta estructura futurista y ondulante. Con su forma que desafía la gravedad y su extraña estética, podría ser una de las casas diminutas más extrañas del mundo.

La estrafalaria residencia se encuentra en la ciudad de Göppingen, en el estado alemán de Baden-Württemberg, y es tan disparatada como intrigante.

Conocida como AirLoft, la vivienda tiene forma de megáfono y presenta una base delgada que se hincha lentamente hasta convertirse en una estructura orgánica y rotunda en la parte superior. Y lo que es aún más inusual, se puede acceder a la pequeña casa a través de una imponente escalera de plexiglás que conduce a una puerta principal elevada.

En la planta baja también hay una caja de cristal, donde los huéspedes pueden sentarse en una silla huevo y contemplar el entorno

Dentro encontrarás un salón y una cocina, así como este dormitorio futurista. Este acogedor espacio cuenta con un cuarto de baño transparente y una cama similar a la de una nave espacial.

Gracias a la altura de la casa (y a sus amplias ventanas), los huéspedes pueden disfrutar de unas preciosas vistas del parque que la rodea. Estamos seguros de que esta estancia surrealista te proporcionará una noche inolvidable.

Semejante a un gigantesco invernadero habitable, esta espectacular casa se encuentra en los parajes salvajes de Brålanda (Suecia).

La vivienda, de estructura en forma de A, se construyó con madera y cristal, y tiene dos enormes lados inclinados que captan la luz del sol y permiten producir alimentos en el interior.

La encantadora residencia fue diseñada por Niklas Dahlström y Anders Solvarm de Naturvillan, especialistas en casas sostenibles, y es el modelo Atri de la empresa.

Aunque el exterior es casi demasiado estrafalario para ser verdad, el interior mezcla el diseño tradicional de la casa con intervenciones modernas, incluido un gran jardín interior para cultivar verduras y frutas. Descrita por Naturvillan como la "casa del futuro", esta joya aislada de la red tiene un enorme panel solar, que permite a la casa producir su propia energía.

En cuanto a las habitaciones, la planta baja cuenta con una amplia entrada, el invernadero, un cuarto de baño, cocina, dormitorio, sala de estar, comedor y patio, mientras que arriba encontrarás dos dormitorios más, un cuarto de baño y un balcón, desde el que podrás disfrutar de unas vistas encantadoras.

Dejando que sea la naturaleza la que hable, la casa conserva una sencilla paleta de materiales de madera, complementada con mobiliario moderno. Si te apetece pasar la noche aquí, la casa se puede alquilar a través de Airbnb.

Es difícil imaginar cómo pudo llegar a existir una casa como ésta. ¿De dónde sacó la inspiración el diseñador y qué le hizo querer construir algo tan oscuro? Pues bien, para Ferdinand Cheval, todo empezó con una piedra.

En abril de 1879, Cheval, que era cartero, tropezó con una piedra durante su ronda. Era tan extraña y hermosa que se la guardó en el bolsillo, deseando admirarla. Al día siguiente, volvió al mismo lugar y encontró más piedras insólitas. "Me dije: si la naturaleza quiere hacer escultura, yo haré albañilería y arquitectura", se le cita.

Cheval pasó los 33 años siguientes (entre 1879 y 1912) construyendo un palacio en su huerto, inspirándose en la piedra, así como en la naturaleza y en las primeras revistas ilustradas que publicó durante su carrera. Para obtener los materiales de construcción, Cheval empujaba una carretilla a lo largo de su ruta postal, recogiendo piedras. Completó la construcción en solitario y sin seguir ninguna regla, lo que dio como resultado un edificio verdaderamente único.

El palacio no estaría poblado por personas, sino por animales salvajes: desde pulpos a ciervos, elefantes y aves, un sinfín de criaturas decoran la fachada de esta bella y atrevida estructura. También podrás avistar muchos personajes mitológicos, como hadas y gigantes, que no hacen sino aumentar el misticismo de esta sorprendente propiedad.

Cheval mezcló numerosos estilos arquitectónicos diferentes al crear el palacio, como el chino, el argelino y el del norte de Europa. Cheval llamó a su asombrosa creación Le Palais Idéal, o el Palacio Ideal, y no es de extrañar que haya inspirado a artistas durante más de un siglo. En 1969, fue clasificado como monumento histórico. Hoy está abierto al público.

La Casa Hundertwasser (Hundertwasserhaus), situada en la ciudad austriaca de Viena, no se mezcla en absoluto con los edificios que la rodean.

Atrevida, colorida y un poco alocada, la propiedad alberga 52 apartamentos, cada uno con una fachada de un color distinto, así como cuatro oficinas y 19 terrazas exteriores. También hay 19 jardines con 250 árboles en el tejado.

La estructura fue diseñada por el arquitecto austriaco Josef Krawina y el artista Friedensreich Hundertwasser. Fue el primer proyecto arquitectónico de Hundertwasser, pero luego ayudó a diseñar unos 50 más en toda Europa, incluido el muy controvertido Spittelau, también en Viena.

Sorprendentemente, Hundertwasser diseñó el edificio gratis, pero a cambio quería tener total libertad artística. Odiaba las líneas rectas y los ángulos, por lo que todos sus proyectos presentan una atrevida combinación de formas y patrones.

La propiedad se construyó entre 1983 y 1985 y parece un colorido rompecabezas, con pintorescas ventanas, un arco iris de tonalidades, aberturas asimétricas y adornos estrafalarios.

Se dice que los suelos están torcidos y que en el interior de algunos apartamentos hay árboles que crecen, con raíces y ramas que salen de las ventanas. Esta imagen muestra la zona comercial del interior del edificio, con un enorme tejado de cristal, una fachada de ladrillo falso y otros detalles elaborados. La ames o la odies, la Casa Hundertwasser es innegablemente única.

Sumergida en una ladera de Surselva (Suiza), esta propiedad subterránea es cualquier cosa menos corriente. Construida en 2009, la casa se diseñó para integrarse en el paisaje y proteger el ecosistema local.

Para eliminar la necesidad de una nueva carretera o de construcciones adicionales, el acceso solo es posible a través de un túnel que atraviesa la ladera de la montaña, con la entrada oculta en el interior de un granero histórico.

Si los huéspedes consiguen entrar en Villa Vals, serán recibidos por una espectacular entrada de hormigón que conduce a las profundidades de la casa.

Semejante a una lujosa casa búnker, el vestíbulo es seriamente imponente y solo recuerda un poco a una película de James Bond.

Gracias a la gran ventana curvada de la casa, los espacios interiores son sorprendentemente luminosos y acogedores. Amuebladas con piezas de diseño, las zonas de estar contemporáneas están acabadas con hormigón visto y acentuadas con piezas eclécticas. En cuanto a las habitaciones, hay una cocina moderna, un comedor, una sala de estar y cuatro dormitorios. Además, la fachada se inclina hacia arriba, enmarcando preciosas vistas de las cadenas montañosas del lado opuesto del valle. ¿Quién dijo que las casas raras no pueden ser bonitas?

Situado a orillas de la mayor zona de mareas del mundo, De Waddenzee, Patrimonio Mundial de la Unesco, este extraño edificio es en parte grúa, en parte casa al revés y en parte Transformer.

Conocida como El Embudo, está elevada del suelo gracias a cuatro patas en forma de insecto.

Sobre la plataforma para las piernas se asienta una casa invertida, cuyo tejado ancla el edificio a sus elevados cimientos. La atrevida paleta de colores rojo y negro de la casa y su forma angulosa contribuyen a su inusual estética.

Los huéspedes pueden acceder al interior gracias a una escalera de caracol que conduce desde el suelo hasta la puerta principal.

Dentro, encontrarás una elegante sala de estar, equipada con un salón, un comedor, una pequeña cocina, una cama y un cuarto de baño independiente. Todas las mañanas se sirve a los huéspedes un desayuno de lujo, y quien tenga la suerte de pasar la noche puede pasar las horas contemplando el paisaje exterior, siempre cambiante.

La marea en De Waddenzee cambia dos veces al día. En un momento encontrarás kilómetros de marismas y al siguiente todo el paseo marítimo estará inundado. ¿Qué te parece esto?

Cuando veas por primera vez esta propiedad en Oxfordshire, Inglaterra, es probable que hagas una doble toma. Aunque parezca una ilusión óptica, la residencia tiene realmente una estatua de tiburón gigante que sobresale de su tejado. ¿Por qué?

Bueno, según el actual propietario, Magnus Hanson-Heine, la escultura de tiburón de fibra de vidrio y acero de 7,6 m (25 pies) de largo se titulaba originalmente "Sin título 1986" y se instaló ese mismo año.

Diseñada para que pareciera que un tiburón "se estrellaba contra el tejado de una casa normal, en una tranquila calle residencial", la instalación fue concebida por el difunto padre de Magnus, Bill Heine, y el escultor John Buckley. El dúo la creó en secreto y la instaló sin permiso de obras.

Como era de esperar, muchos vecinos no estaban contentos y se inició una batalla legal de seis años con el Ayuntamiento de Oxfordshire. El caso llegó a los tribunales, hasta que intervino el gobierno. El entonces Secretario de Estado de Medio Ambiente, Michael Heseltine, visitó la propiedad y finalmente dictaminó que el tiburón podía quedarse.

Según Magnus, el desconcertante escultor fue diseñado para reflejar la oposición a la intervención militar y a la guerra, incluida la destrucción de los hogares y las vidas de las personas. Bill Heine se inspiró, en parte, al presenciar el vuelo de aviones de guerra sobre Trípoli, en Libia, la noche en que se mudó a la casa.

El tiburón se instaló el 9 de agosto de 1986, coincidiendo con el aniversario del lanzamiento de la segunda bomba atómica sobre Nagasaki. Hoy, la propiedad es un genial alquiler de Airbnb y, aunque el exterior es totalmente inesperado y atrevido, el interior es sorprendentemente tranquilo y sobrio.

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