Probablemente, hayas invertido mucho tiempo, esfuerzo y dinero en hacer de tu casa un oasis acogedor, pero ¿podrías haber cometido un error al crear un refugio para toda una serie de animales, bichos y criaturas? Aunque algunas plagas domésticas comunes pueden disuadirse y eliminarse con facilidad, otras están protegidas por la ley, por lo que es ilegal molestarlas o hacerles daño. Desde los coyotes a las marmotas y desde las mofetas a las ardillas listadas, estas plagas protegidas son en cierto modo intocables.

Haz clic o desplázate por nuestra galería para saber cómo tratar a estos huéspedes no invitados si se infiltran en tu casa o jardín…

Adaptado al español por Rocío Durán Hermosilla, Redactora en Español para lovePROPERTY​

También conocidos como chacal americano o lobo de las praderas, los coyotes son una especie canina autóctona de Norteamérica. Tienen pelaje marrón, orejas puntiagudas, hocico delgado y cola larga y tupida, lo que los hace parecerse a los pastores alemanes. Aunque los coyotes suelen ser bastante tímidos y solitarios, se han adaptado a los entornos urbanos y a menudo se les puede ver en barrios residenciales, a la caza de su próxima comida.

Los coyotes son animales salvajes y, aunque pueden ser potencialmente peligrosos, los ataques contra humanos son muy raros. Sin embargo, pueden suponer un riesgo para los animales domésticos e incluso pueden verlos como comida. Cabe señalar que, cuando crían, los coyotes construyen madrigueras y a menudo lo hacen cerca de zonas residenciales, en árboles volcados o bajo salientes rocosos. También se sabe que crean refugios bajo cobertizos, graneros y terrazas.

Los coyotes se consideran animales de compañía en la mayoría de los estados y, como tales, los propietarios tienen derecho a eliminarlos. Sin embargo, algunos estados pueden tener normas en vigor que determinan que solo se puede hacer frente a los coyotes durante determinados meses del año.

Por ejemplo, en Florida es legal atrapar o acabar con los coyotes durante todo el año, pero en Massachusetts solo se pueden cazar de octubre a marzo y atrapar durante el mes de noviembre. Por tanto, consulta siempre a las autoridades locales.

Lo mejor es disuadir humanamente a estas plagas. Las novatadas (ruido) obligarán a los coyotes a moverse y desalentarán comportamientos indeseables. Prueba a gritar y agitar los brazos mientras te acercas al coyote o a golpear cacerolas. También puedes rociarlos con una manguera.

Por último, mete a tus mascotas en casa por la noche y asegúrate de que en tu jardín no haya nada que un coyote pueda considerar comida. Una buena valla también los mantendrá alejados de tu jardín.

Presentes en toda Norteamérica, incluidos Canadá y Alaska, las marmotas son roedores que pertenecen a la familia de los esciúridos. Son muy inteligentes pero retraídas, y pasan la mayor parte del tiempo solas.

Se las puede encontrar en bosques, campos y setos, buscando plantas. Aunque son inofensivas, a menudo se las considera una molestia, sobre todo para los agricultores. Les encanta excavar grandes madrigueras, que pueden llegar a medir hasta 66 pies de largo, a menudo en pastos, a lo largo de vallas y cerca de los cimientos de edificios o las bases de los árboles. Inevitablemente, esto puede provocar daños materiales.

Aunque no están necesariamente protegidas por la ley, las normas relativas a la caza y captura de marmotas difieren de un estado a otro. En Misuri, están clasificadas como mamíferos cinegéticos y pueden capturarse durante la temporada de caza establecida, mientras que en Indiana, las marmotas pueden capturarse todo el año, sin permiso ni licencia de caza. Consulta siempre a las autoridades locales, o ponte primero en contacto con una empresa de control de plagas.

Dicho esto, las personas y las marmotas pueden coexistir sin problemas, así que si una está excavando en tu propiedad y no causa ningún problema, lo mejor es dejarla en paz. Sin embargo, si causan daños a los cultivos o a la propiedad, hay medidas que puedes tomar. Mantén el jardín libre de escombros, recoge los productos con regularidad y considera la posibilidad de instalar una valla a prueba de marmotas.

Los disuasores naturales como el aceite de ricino, la pimienta roja y las mezclas de hierbas pueden irritar a las marmotas. La Sociedad Humanitaria de Estados Unidos también sugiere suspender un globo de helio o una pelota de playa en un lugar que atrape el viento para asustarlas. Asegúrate también de cerrar las madrigueras vacías con alambre de cerca soldado de gran calibre, enterrado al menos a 30 cm de profundidad.

Hermosas y seductoras, las lechuzas comunes se definen por su cara en forma de corazón, sus plumas moteadas y su vientre blanco puro. Se pueden encontrar en casi todo el mundo, en zonas rurales y granjas, ya que necesitan grandes extensiones de terreno abierto para cazar. Sin embargo, a veces invaden zonas urbanas periféricas, donde pueden surgir problemas.

Cuando anidan, las lechuzas comunes pueden instalarse en edificios, dejando a su paso egagrópilas (bolas formadas por restos de alimentos no digeridos que regurgitan algunas aves carnívoras), excrementos y un sinfín de plumas. Como todas las aves, la lechuza común puede ser portadora de una serie de parásitos que también pueden infectar a humanos y animales domésticos, como pulgas, piojos y tenias.

Las lechuzas comunes están protegidas en Norteamérica, ya que su número ha disminuido gravemente en los últimos años, debido a factores como la pérdida de hábitat y los pesticidas. Esto significa que los humanos no pueden manipular, dañar o acosar a las aves, sus nidos o sus crías.

La protección contra las molestias termina cuando el último búho joven se independiza, por lo que, en esta fase, puedes llamar a un profesional para que analice tus opciones. La mejor acción es intentar disuadirlos de que vuelvan. Instala mallas antipájaros para sellar los lugares atractivos para anidar, como desvanes, vigas y huecos.

Si encuentras un nido en tu propiedad, mantente alejado, pues los búhos pueden volverse agresivos cuando defienden a sus crías. Cabe señalar que otras aves, como los halcones, también están protegidas.

Las mofetas pueden parecer adorables, pero estos pequeños y esponjosos mamíferos tienen grandes personalidades. Son conocidos por su capacidad para rociar un líquido de sus glándulas cuando se sienten amenazados, que tiene un olor persistente y muy desagradable. Pueden encontrarse tanto en Sudamérica como en Norteamérica, incluidos el sur de Canadá y el norte de México, y dependiendo de la especie, su pelaje varía del blanco y negro al jengibre y crema.

Suelen vivir en zonas boscosas y praderas, pero también pueden infiltrarse en zonas urbanas. Como les gusta excavar, pueden dañar edificios y causar problemas estructurales. Las mofetas también pueden arruinar los jardines, desenterrando el césped y los parterres en busca de comida.

Entonces, ¿qué puedes hacer si tienes un problema con una mofeta? En Nueva York, las mofetas rayadas están protegidas desde finales del siglo XIX, mientras que en Illinois necesitas un permiso del biólogo de fauna salvaje del distrito del Departamento de Recursos Naturales antes de eliminar una mofeta.

California las clasifica como mamíferos no cinegéticos, por lo que los propietarios e inquilinos pueden, en cualquier momento, eliminarlas letalmente, si están causando lesiones o daños. Dado que las normas varían mucho según el lugar, tendrás que consultar a los responsables de vida silvestre de tu estado antes de actuar.

A las mofetas no les gusta el olor de los cítricos, así que para disuadirlas, coloca cáscaras de naranja o limón alrededor de tu jardín como repelente natural. También puedes rociar alrededor de los límites una mezcla de aceite de ricino y jabón de fregar, diluida en agua. También puedes asegurarte de que tu jardín esté libre de arbustos y matorrales crecidos, donde pueden esconderse, y se dice que las luces brillantes del jardín las mantienen a raya.

Las ranas y los sapos son pequeños anfibios que pueden parecer similares, pero hay algunas diferencias clave. Las ranas suelen tener una piel lisa y suave que parece mojada, incluso cuando no están en el agua. Tienen patas largas y son excelentes saltadoras. En cambio, los sapos (en la foto) tienen la piel rugosa y verrugosa, son rechonchos y de patas cortas.

Tanto las ranas como los sapos comen insectos y cochinillas. A las ranas les encantan las babosas y los caracoles, mientras que a los sapos les gustan las hormigas, por lo que son estupendos para el control natural de plagas. Como anfibios, necesitan agua para sobrevivir y les encantan las condiciones húmedas, por lo que suelen encontrarse en estanques y zonas pantanosas de todo el mundo. De hecho, pueden encontrarse en todos los continentes, excepto en la Antártida.

Durante la primavera, los anfibios regresan a los estanques para reproducirse, por lo que pueden verse en gran número en esta época. Aquí es donde algunos propietarios entran en pánico, pero en realidad no hay que preocuparse por la presencia de ranas y sapos en tu jardín...

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Lamentablemente, muchas ranas y sapos están en peligro de extinción. De hecho, según la Lista Roja de la UICN, se considera que el 41% de todas las especies de anfibios están amenazadas de extinción. En el Reino Unido, EE.UU. y Australia, las ranas y los sapos están protegidos, ya que su número está disminuyendo. Por tanto, no puedes hacer nada para dañarlas o disuadirlas. Por el contrario, debes dejarlas en paz.

Si crees que una rana o un sapo necesita ayuda, trasládala a otra parte del jardín que le proporcione cobertura frente a los depredadores y las condiciones climáticas extremas, como un montón de compost o debajo de un cobertizo. Lleva siempre guantes.

Sin embargo, a menos que uno esté atrapado o en peligro, no debes intentar moverlo. Si tienes un gran número durante la época de cría, que no cunda el pánico. Se dispersarán de forma natural en los días y semanas siguientes.

Gracias al folclore y a las historias fantásticas, los murciélagos se han ganado un poco de mala reputación. Sin embargo, estos mamíferos voladores nocturnos son fascinantes. Contrariamente a la creencia popular, los murciélagos no son ciegos. Tienen ojos pequeños y una visión sensible, que les ayuda a ver en condiciones de oscuridad total, con ayuda de la ecolocalización, o biosonar.

Esencialmente, emiten impulsos sonoros de alta frecuencia y escuchan el eco para encontrar su camino y localizar comida. Hay más de 1.400 especies en el mundo y utilizan diversos hábitats a lo largo del año, para alimentarse, posarse y viajar.

A los murciélagos les gustan los espacios tranquilos y oscuros para dormir y reproducirse, por lo que a menudo se cuelan en los áticos y dependencias de la gente. Esto puede causar problemas si quieres renovar un espacio habitado por murciélagos. También pueden ser portadores del virus de la rabia, llamado lisavirus del murciélago europeo, por lo que nunca debes acercarte a uno.

Los murciélagos están protegidos en todo el mundo porque desempeñan un papel importante en muchos hábitats. En algunos lugares, las plantas dependen parcial o totalmente de los murciélagos para polinizarlas. En Estados Unidos, muchos estados regulan la exclusión de los murciélagos.

Por ejemplo, no puedes trasladar murciélagos durante la época de maternidad, que va de mediados de abril a finales de agosto en Norteamérica, según el clima. Debes esperar hasta el otoño o el invierno, cuando todas las crías de murciélago puedan volar y la colonia se haya trasladado. Básicamente, estés donde estés, no puedes coger, herir o destruir un murciélago silvestre, ni molestar intencionadamente a los murciélagos que se posan.

Si descubres murciélagos anidando en una propiedad tuya, el dormidero está protegido por la ley. Debes asegurarte de que todos los puntos de salida no estén bloqueados y pedir consejo a un profesional.

Si quieres evitar que los murciélagos se posen en tu propiedad, asegúrate de que los aleros y las tejas del tejado son seguros, y rellena los pequeños agujeros de los edificios.

Al igual que las ranas y los sapos, los tritones crestados son anfibios que necesitan una fuente de agua para sobrevivir. Pueden llegar a medir hasta 17,1 cm de largo y tienen una piel característica. Son casi negros, con los flancos manchados y un vientre llamativo y anaranjado. Los tritones crestados, como los sapos, tienen la piel verrugosa, y los machos presentan una larga cresta ondulada que les recorre el cuerpo durante la época de reproducción.

Estos tritones pueden encontrarse en estanques, pero también pasan largos periodos del año en bosques, setos y marismas. Sin embargo, tienen unas necesidades de agua muy exigentes, por lo que no suelen aventurarse en los estanques de los jardines. Pero si piensas construir una casa en un lugar donde viven tritones, deberás proceder con cautela.

Los tritones crestados están legalmente protegidos en EE.UU. porque su población está amenazada. Se cree que la fragmentación del hábitat, las enfermedades y los efectos del cambio climático han provocado la disminución de su población, por lo que, en todo caso, debemos fomentar su presencia.

Si tienes un estanque grande en tu jardín, puedes animar a los tritones crestados haciendo que uno de los lados se incline gradualmente hacia tierra firme, para que los jóvenes anfibios puedan salir del agua. Una rampa cubierta de alambre de gallinero puede ayudar. Como pueden ser presa de los pájaros, cultivar plantas alrededor del estanque les proporciona cobijo y protección.

Los tejones americanos son omnívoros de patas cortas, con la cara rayada de blanco y negro, la cola esponjosa, el vientre y las patas negras. Son fantásticos excavadores, gracias a sus fuertes garras, y son principalmente nocturnos. Viven en setts (túneles que excavan bajo tierra) y son nativos de gran parte de Norteamérica, incluidos Estados Unidos, el norte de México y el centro-sur de Canadá.

Aunque generalmente se encuentran en el campo, donde abundan las presas, los tejones pueden entrar en los patios traseros en busca de comida. Esto puede provocar daños en el césped y los parterres, pero aparte de eso, estas tímidas criaturas no suponen una amenaza real para el ser humano.

Si tienes problemas con los tejones que desentierran tu jardín y quieres hacer algo al respecto, conviene que sepas que están ampliamente protegidos en Norteamérica.

Conocido como el "Estado del tejón", atrapar a estos mamíferos monocromos en Wisconsin es ilegal. Sin embargo, en Illinois se pueden atrapar o retirar con un permiso desde mediados de noviembre hasta mediados de febrero.

Considera la posibilidad de disuadirlas de tu jardín utilizando luces brillantes o bloqueando el acceso a lo que las atraiga, como fuentes de alimento o refugio.

¿Sabías que una de cada cinco especies conocidas de la Tierra es un escarabajo? De hecho, se cree que hay más de 400.000 escarabajos diferentes en todo el mundo. A menudo tienen mala fama, pero desempeñan un papel vital en la salud del planeta. En EE.UU., innumerables especies están protegidas, como el escarabajo enterrador americano y el escarabajo tigre.

Los escarabajos ciervos (en la foto) se consideran una especie en peligro de extinción en EE.UU., ya que su hábitat está disminuyendo y sus poblaciones también están disminuyendo en gran parte de Europa.

Generalmente se encuentran en bosques, setos, huertos, parques y jardines, donde hay mucha madera muerta, ya que de ella se alimentan.

Es posible que muchos jardineros deseen deshacerse de los escarabajos, pero muchos son totalmente inofensivos y, de hecho, pueden contribuir a mejorar tu espacio exterior. Como los ciervos volantes solo se alimentan de madera muerta, no suponen ninguna amenaza para los árboles o arbustos vivos, así que no hay por qué asustarse si los ves en tu jardín. En lugar de eso, estimúlalos para que prosperen y recogerás los frutos, con un jardín sano y diverso.

Estimula a los ciervos volantes conservando los tocones de madera viejos, cuando los árboles o arbustos leñosos mueren, caen o son talados. Esto les proporciona madera en descomposición esencial para alimentarse. Como están protegidos, no debes interferir con ellos. Evita utilizar pesticidas e insecticidas en tu jardín y ten cuidado al cavar, pues depositan sus larvas bajo tierra.

Las ardillas son pequeños roedores de cuerpo esbelto y pelaje corto, cola tupida y ojos grandes. Son ágiles y suelen vivir en los árboles. En algunas partes de EE.UU., como el estado de Washington y Oregón, la ardilla gris occidental (en la foto) se considera ahora en peligro de extinción. La disminución de su número se ha debido a la pérdida de hábitat por "la tala, el desarrollo y los incendios provocados por el cambio climático".

Las ardillas blancas también están protegidas en partes de Carolina del Norte, Misuri, Tennessee, Carolina del Sur, Florida y Virginia, mientras que la ardilla roja del monte Graham está catalogada en peligro de extinción, pero solo puede encontrarse en las montañas Pinaleño del sureste de Arizona.

Sin embargo, las ardillas pueden dañar tu jardín masticando las raíces de las plantas y excavando el césped, ya sea para excavar o para esconder comida. Por eso, quizá quieras tomar medidas para disuadirlas.

Como ocurre con muchas plagas, las normas sobre su control o caza difieren de un estado a otro. Por tanto, debes investigar antes de intentar eliminar una ardilla de tu terreno. Por ejemplo, en Indiana, el zorro y la ardilla gris son especies reguladas y pueden cazarse desde mediados de agosto hasta finales de enero, pero se requiere una licencia. Las ardillas rojas americanas pueden cazarse todo el año, pero las ardillas voladoras del sur están protegidas y no pueden cazarse.

Sin embargo, en Texas, las ardillas se consideran animales de caza y están protegidas por las leyes estatales. Sin embargo, hay situaciones en las que la caza de ardillas es legal en el estado, como cuando "infligen daños a la propiedad o suponen una amenaza para la seguridad pública". Aunque es poco probable, si alguna se cuela en tu casa, llama a una empresa experta en control de plagas con las credenciales adecuadas.

En lugar de cazarlas, considera medidas disuasorias naturales y humanas. Elimina las fuentes de alimento, como frutos secos y semillas, de tu jardín, sella los cubos de basura o prueba con aromas naturales como la menta. A las ardillas también les resultan desagradables ciertas plantas, como los narcisos.

No, no es un error ortográfico: las zarigüeyas pertenecen al orden de los marsupiales, Didelphimorphia, y son originarias de América. Se dice que hay más de 100 especies diferentes de zarigüeyas. Tienen hocico puntiagudo, cuerpo redondeado y cola prensil casi sin pelo.

Por lo general, viven en bosques o pantanos donde llueve abundantemente, pero se han adaptado bien a vivir entre humanos en campo abierto y en zonas urbanas. Hurgan en la basura en busca de comida, lo que puede causar daños y destrozos tanto en jardines como en propiedades. Aunque son inofensivas, si están protegiendo a sus crías y se sienten amenazadas, podrían morder.

¿Qué puedes hacer si tienes un problema de zarigüeyas? En primer lugar, si ves zarigüeyas en tu jardín y no causan problemas, déjalas en paz. Si rebuscan entre los desperdicios, asegúrate de que las tapas de los contenedores están bien cerradas para que los animales no puedan acceder a ellos. Las zarigüeyas a veces construyen madrigueras debajo de las casas, áticos o garajes, por lo que deberás bloquear cualquier abertura por la que puedan entrar.

Hay que tener en cuenta que las leyes y normativas varían de un estado a otro. Por ejemplo, las zarigüeyas se pueden atrapar y cazar legalmente en Connecticut, pero en Massachusetts están clasificadas como animales de peletería, para los que se han establecido programas de gestión y temporadas reguladas de caza y captura. Por tanto, si quieres eliminar una zarigüeya, tendrás que consultar primero a las autoridades locales.

Los disuasores naturales, como el aceite de menta o la pimienta de cayena mezclados con agua, pueden ayudar a mantenerlas a raya.

No es difícil entender por qué a algunas personas no les gustan las serpientes. Con su cuerpo largo y sin patas, su piel escamosa y su lengua bífida, pueden resultar intimidantes. En todo el mundo hay innumerables especies, y en América viven serpientes como la serpiente de agua común y la serpiente de cascabel del Pacífico Norte, por nombrar algunas.

Hay una gran variedad de hábitats de serpientes en todo el mundo, como bosques, desiertos y zonas boscosas, pero como los reptiles no entienden de fronteras, pueden introducirse en los jardines.

Si ves una serpiente en tu jardín, mantén la distancia y espera a que se vaya. Las serpientes suelen hacerlo a su debido tiempo, así que, a menos que estén a punto de causar lesiones a una persona, no debería ser necesario interferir.

En Estados Unidos, las serpientes se consideran "fauna no cinegética" y, por tanto, están protegidas por la ley en la mayoría de los estados. Por ejemplo, la Boa de Mona, la Serpiente del Pino Negro y la Serpiente del Pantano Salado del Atlántico están protegidas en todos los EE.UU., y matarlas (y matar a otras), podría acarrear multas de unos 23.300 € por infracción y penas de prisión. Otras no están protegidas, así que consulta esta lista y ponte en contacto con tu autoridad local antes de actuar. 

Si crees que tienes un problema, llama a un profesional y nunca intentes enfrentarte a la serpiente tú mismo, ya que muchas especies son venenosas. Puedes disuadir a las serpientes con algunos olores clave, como la canela, la cebolla, el ajo y la lima.

Los zorros pueden encontrarse en Europa, partes de Asia, norte de África y la mayor parte de Norteamérica. Este mamífero omnívoro es innegablemente regio y bello, con orejas erguidas y triangulares, hocico puntiagudo y cola larga y tupida. En su mayor parte, son inofensivos.

Sin embargo, durante la época de apareamiento, pueden mostrar comportamientos más aventureros, ya que buscan pareja y una guarida para cuidar a sus crías. Estos hábitos pueden acercarlas a los humanos y causarles problemas inesperados y costosos.

Como les gusta cavar, pueden debilitar rápidamente los cimientos de terrazas, porches y cobertizos, causando daños estructurales con el tiempo. Una familia de zorros también puede destrozar el césped y los parterres, además de hurgar en la basura y causar un desorden considerable. Entonces, ¿qué se puede hacer al respecto?

En Estados Unidos, los zorros se consideran "furbearers protegidos" (animales cazados por sus pieles) o animales de caza en la mayoría de los estados. Muchos organismos de protección de la fauna permiten la eliminación de zorros para proteger la propiedad privada, pero otros son más estrictos. Por ejemplo, en Virginia Occidental es ilegal atrapar animales sin permiso o trasladarlos a otro lugar sin autorización previa. En Utah, los zorros rojos están clasificados como fauna protegida. Sin embargo, pueden capturarse durante todo el año, sin necesidad de licencia. Por tanto, debes buscar asesoramiento local antes de actuar.

Ten en cuenta que el zorro rojo de Sierra Nevada está protegido y catalogado como especie en peligro de extinción, mientras que el zorro kit de San Joaquín está catalogado a nivel federal como especie en peligro de extinción y catalogado como especie amenazada por California. También hay otros zorros protegidos, así que comprueba antes la normativa de tu estado.

Lo mejor que puedes hacer es disuadir a los zorros. Para ello, elimina las fuentes de alimento: asegura o guarda bajo llave los cubos de basura, invierte en comederos para pájaros que no derramen comida por el suelo, protege los cultivos comestibles y recoge rápidamente los frutos caídos. Los fertilizantes de pescado, sangre y huesos también pueden atraer a los zorros, así que considera la posibilidad de cambiar a un producto de origen vegetal.

Si un zorro ya ha hecho su madriguera en tu jardín, espera a que los cachorros hayan abandonado la madriguera a finales de verano, antes de tomar medidas disuasorias. Puedes animar a la madre zorro a mover a sus cachorros haciendo ruido y caminando cerca.

Simpáticos, juguetones y un poco traviesos, los mapaches son mamíferos nocturnos que viven en todo el mundo, desde Asia hasta América del Norte y del Sur. Pueden encontrarse tanto en zonas rurales boscosas como en grandes ciudades, lo que significa que comerán de todo, desde frutas y semillas hasta restos de comida humana.

De hecho, los mapaches se han convertido en carroñeros problemáticos y en las ciudades y pueblos se les puede encontrar a menudo hurgando en los cubos de basura en busca de comida. A pesar de ser simpáticos, muchos propietarios de viviendas en Estados Unidos los consideran plagas problemáticas, ya que pueden causar daños en jardines y estructuras (cuando buscan refugio). También pueden transmitir la rabia y contagiar la lombriz intestinal del mapache, además de otras enfermedades.

A pesar de ser una molestia, los mapaches son animales de compañía protegidos en la mayoría de los estados de EE.UU. y existen temporadas establecidas para su caza y captura. La mayoría de los estados tienen disposiciones para que los propietarios controlen a los animales que dañan su propiedad, así que infórmate en tu ayuntamiento.

Por ejemplo, en Nueva York, cazar o atrapar mapaches requiere una licencia, pero en Delaware, los mapaches pueden ser atrapados legalmente en un dispositivo tipo caja, "operado de tal manera que confine pero no dañe de otra manera al mapache atrapado".
Puesto que más vale prevenir que curar, hay algunas medidas que puedes tomar para disuadir a los mapaches de tu terreno. Para empezar, invierte en un cubo de basura a prueba de animales salvajes, o asegura las tapas con cuerdas, cuerdas o pesos. Evita dar de comer a las mascotas en el exterior, pues las sobras podrían atraer a los animales salvajes.

También deberás asegurarte de que las dependencias son seguras, sin aberturas por las que pueda colarse un animal en busca de refugio.

Los topos son innegablemente adorables, pero también muy inusuales. Estos pequeños mamíferos viven principalmente bajo tierra, en elaboradas madrigueras que crean utilizando sus poderosas extremidades anteriores y sus grandes patas. Tienen un pelaje aterciopelado y ojos y orejas discretos, y los científicos creen que son daltónicos y miopes.

Los topos se encuentran en la mayor parte de Norteamérica, Europa y Asia, y suelen instalarse en campos, bosques y, para disgusto de los propietarios, jardines. Lamentablemente, los topos suelen considerarse plagas, ya que pueden causar daños en el césped, gracias a sus montículos sobre el suelo. Sin embargo, son excelentes para los ecosistemas, ya que ayudan a airear el suelo y se alimentan de otras molestas plagas del jardín, como las babosas.

Entonces, ¿qué puedes hacer si tienes un problema de topos? En Estados Unidos, los topos no están protegidos en la mayoría de los estados, pero no en todos. En Washington, los topos no están clasificados y la gente puede atraparlos o matarlos en su propiedad si causan daños.

Sin embargo, en Pensilvania están clasificados como mamíferos no cinegéticos y protegidos. Dicho esto, pueden controlarse cuando causan daños. Consulta las leyes locales para conocer los tipos de trampas, tóxicos y otros métodos de control que pueden utilizarse.

Cortar el césped con frecuencia y otras actividades ruidosas pueden ayudar a disuadir a los topos, mientras que algunos dicen que las sondas vibratorias, incrustadas en el césped, son una buena forma de mantenerlos a raya.

Al igual que los icónicos personajes de la pantalla, Alvin, Simon y Theodore, las ardillas listadas son pequeñas, monas y juguetonas. Pero también pueden ser un gran problema para los propietarios de viviendas. Estos pequeños roedores rayados pertenecen a la familia de las ardillas y viven sobre todo en Norteamérica. Hay 25 especies de ardillas listadas y cada una tiene ojos y orejas prominentes, cola peluda y pequeñas garras.

¿Qué las hace tan problemáticas? Bueno, son unas excavadoras fantásticas y destrozarán rápidamente tu jardín cuando busquen comida. Pueden devorar tus verduras y plantas cuidadosamente cultivadas e incluso construir madrigueras en tu césped. Lo que es más preocupante, los túneles subterráneos que excavan pueden afectar negativamente a los cimientos, patios, paredes e incluso aceras.

Entonces, ¿qué puedes hacer si tienes un problema de ardillas listadas? Las ardillas listadas no están protegidas por la legislación federal, pero pueden aplicarse normativas estatales y locales. Por ejemplo, Georgia, Carolina del Norte y Arkansas exigen un permiso para destruir animales no cinegéticos. Lo mejor es consultar con tu organismo local de conservación para establecer la situación legal de las ardillas listadas en tu estado. Sin embargo, la mayoría de los estados permiten a los propietarios capturar y eliminar las ardillas listadas si están causando, o a punto de causar, daños a la propiedad.

Por supuesto, hay varias formas de disuadir a las ardillas listadas de tu terreno. En primer lugar, a las ardillas listadas no les gusta el agua, por lo que encender los aspersores puede ahuyentarlas. Los disuasores naturales como el ajo, la sidra de manzana, la menta y los posos de café también pueden disuadirlas.

Protege tus plantas cubriéndolas con alambre de gallinero o tela metálica. Por último, los dispositivos ultrasónicos deberían mantenerlas alejadas para siempre. Emiten vibraciones y sonidos que no gustan a las ardillas listadas.

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