El sur de los Estados Unidos está lleno de grandes y olvidados edificios históricos. El fotógrafo Leland Kent es un experto en la materia. Saboreando el pasado a través de sus increíbles imágenes, su trabajo arroja luz sobre los tesoros derruidos de la región.

El libro de Leland Abandoned Alabama: Exploring the Heart of Dixie recorre las estructuras ruinosas más impresionantes del estado algodonero, desde hospitales hasta viviendas.

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Adaptado al español por Alba Mora Antoja, Redactora en Español para loveMONEY.

Leland Kent se ha topado con más de una mansión abandonada en ruinas. Entre las más destacadas está esta belleza de ladrillo construida en 1899 para el senador estatal Robert H. Moulthrop, más recordado por redactar la Ley de Educación Igualitaria de Alabama.

Híbrido de los elegantes estilos del Renacimiento Imperial y la Reina Ana, la casa torreada de cinco dormitorios es una auténtica joya a pesar de su estado ruinoso actual.

Junto con su familia, el senador era propietario de la mayor fábrica de ladrillos del estado, de ahí la excepcional calidad de los muros exteriores, que en algunos puntos tienen seis ladrillos de grosor.

Como puedes ver en esta foto de la veranda con columnas, la mampostería está en buen estado, mientras que el tejado y otras partes de la estructura están prácticamente derruidos.

Explorar el interior de Moulthrop House no es para los que sufren de problemas cardiovasculares. En el salón, se han derrumbado partes del tejado, y el resto parece que podría derrumbarse en cualquier momento.

Hay montones de escombros por el suelo y lo que sin duda fue una atractiva chimenea ahora no es más que un agujero desintegrado en la pared.

Puede que el cuarto de baño conserve la mayor parte de sus baldosas, pero la pared se ha doblado en algunas partes (las paredes interiores de la mansión no son de ladrillo resistente como las exteriores) y también está inundada de escombros. Incluso hay lo que parece ser un enorme agujero en el suelo.

La otrora gran finca perteneció a la familia Moulthrop hasta la década de los ochenta, cuando fue vendida a un promotor inmobiliario que la dejó pudrirse.

Por suerte, el futuro parece brillante para la mansión victoriano. En junio de 2020, la casa y sus terrenos fueron adquiridos por un grupo LLC que incluye a descendientes del senador Moulthrop, y la propiedad está siendo objeto de una amplia renovación.

Estaba previsto que el proyecto finalizara en Acción de Gracias de 2021, pero presumiblemente se paralizó debido a la pandemia y no está claro si las obras han comenzado.

Esta obra maestra de mediados de siglo en Birmingham fue diseñada en 1960 por el influyente John Randal McDonald. Este pintoresco personaje se describía a sí mismo como "un arquitecto con A mayúscula" y el "Wright del pobre", ya que su obra se parecía a la de Frank Lloyd Wright, pero era considerablemente más accesible.

A pesar de ello, McDonald llegó a crear casas para una lista de nombres famosos, como Bjorn Borg, Perry Como, James Garner y Maureen O'Hara.

Esta casa de dos dormitorios, único ejemplo de la obra de McDonald en Alabama, es el epítome de su obra, que se caracteriza por la sencillez, la asequibilidad y el uso de materiales naturales. La sala de estar de planta abierto, por ejemplo, tiene el techo de madera noble, ladrillo visto y suelo de terrazo, que dan al espacio un aire orgánico, mientras que las ventanas del suelo al techo hacen que entre el exterior.

Fíjate en el piano de cola y el árbol de Navidad, sin duda restos de una época más alegre.

Abandonada tras fallecer su propietario original, la propiedad de 139 m² llevaba muchos años desocupada cuando Kent la visitó. Como puedes ver, la casa estaba en un estado lamentable, pero sus elementos clave habían sobrevivido, incluida la chimenea de hogar hundido del salón.

La cocina estaba casi desnuda, pero el dormitorio principal estaba mejor equipado, con su armario e incluso el cabecero decorativo y los espejos seguían en su sitio.

En el exterior, la piscina subterránea estaba llena de agua sucia y húmeda que, con el paso de los años, habría sido el hábitat perfecto para mosquitos, caimanes y otras criaturas.

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También había un Chevrolet Corvair de los años sesenta oxidándose en el patio trasero. Avanzamos rápidamente hasta la actualidad y la casa, de gran importancia arquitectónica, ha sido totalmente restaurada.

La compró un grupo de inversores el año pasado, que no perdieron tiempo en arreglarla y ponerla en el mercado por $225.000 (unos 209.250 €). En el terreno, se rellenó la piscina y se puso césped, pero lamentablemente se desconoce el paradero del Chevy.

Alabama tiene una turbulenta historia de injusticia racial. Incluso el apodo de “Dixie” es problemático por sus connotaciones de esclavitud y opresión de la comunidad negra.

Esto se refleja en muchos de los edificios abandonados del estado, como el infame Jemison Center del Hospital Estatal de Alabama para Dementes (ahora, Bryce Hospital), en Tuscaloosa, que ahora es un cascarón abandonado tras años de abandono y vandalismo. Hervidero de actividad paranormal, se dice que es el lugar más embrujado en kilómetros a la redonda.

Bautizado con el nombre de un senador confederado y propietario de personas esclavizadas en cuyos antiguos terrenos se construyeron las instalaciones, el premonitorio manicomio se creó en 1939, durante la época de la segregación, para tratar a pacientes afroamericanos con problemas de salud mental.

En realidad, el hospital funcionaba como un campo de trabajos forzados, donde en lugar de ser atendidos, los que tenían la mala suerte de acabar allí eran más o menos esclavizados.

Se esperaba que sus pacientes trabajaran en la plantación que rodeaba el hospital, cuidando los cultivos en los campos para pagar su estancia y mantener el centro, que carecía de fondos suficientes.

Esta política, que los médicos llamaban eufemísticamente "terapia ocupacional", suscitó polémica en los años sesenta, cuando la opinión pública empezó a preocuparse de que el hospital prolongara la estancia de los pacientes para explotarlos por su trabajo.

El furor llegó a su punto álgido en 1970, cuando un periodista del periódico local visitó la institución e informó de las terribles condiciones que tenían que soportar los pacientes. Muchos carecían de camas y se descubrió que 131 pacientes varones compartían una sola ducha.

Por aquel entonces, se había presentado una demanda contra el igualmente escandaloso Bryce Hospital, y en 1971 se amplió para incluir al Jemison Center.

La sentencia histórica resultante estableció unas normas mínimas para la atención a las personas con enfermedades mentales y condujo al cierre, largamente esperado, del centro en 1977. Doloroso recordatorio del pasado racista de Alabama, ha permanecido vacío desde entonces.

La Outlaw House, o Casa Outlaw, en el condado rural de Mobile, fue diseñada por el célebre arquitecto George Bigelow Rogers y terminada en 1914.

No era una casa cualquiera, sino una elegante mansión considerada uno de los mejores ejemplos de arquitectura del Renacimiento Colonial Español en Alabama y figura entre las casas de época más grandiosas construidas en el estado en el siglo XX.

Cuando Leland Kent la visitó en 2019, la casa estaba en mejores condiciones. Los cristales de las ventanas estaban agrietados o faltaban por completo, la pintura se desprendía de las paredes y los techos, y el suelo estaba lleno de detritus.

Sin embargo, a pesar de su lamentable estado, la mansión seguía siendo hermosa y parecía que no habría sido demasiado difícil arreglarla.

Esto es aún más evidente en el vestíbulo, que había conservado muchos elementos originales. Dado su nombre, se te perdonaría que pensaras que la casa era la guarida de un fugitivo, pero la realidad es todo lo contrario.

La casa recibió el nombre de su residente más notable, George Outlaw, que irónicamente era un antiguo agente del FBI encargado de investigar al Ku Klux Klan, además de abogado y hombre de negocios de primera fila.

Outlaw adquirió la propiedad en 1925, supuestamente tras ganarla en una partida de póquer. Con gran ingenio, construyó una presa sobre un manantial en las 50 hectáreas de terreno, que creó un lago y proporcionó electricidad a la mansión.

De hecho, la Outlaw House fue la primera de la zona en tener electricidad y teléfono, e incluso se dice que tenía un túnel secreto. Sin duda, Outlaw podía permitirse las últimas comodidades, pues fue cofundador de la popular cadena de cafeterías Morrison's.

La casa pasó a manos del hijo menor de Outlaw, Arthur, que vivió allí hasta mediados de los años ochenta, cuando, como alcalde en funciones de Mobile, se vio obligado a trasladarse dentro de los límites de la ciudad. La familia Outlaw siguió siendo propietaria de la casa, pero esta se fue desmoronando.

Por mala suerte, el desastre se produjo en julio de 2021, cuando la casa fue destruida por un devastador incendio que aún no se ha explicado, y sus restos carbonizados fueron demolidos solo cinco meses después.

Situada en el emplazamiento de una antigua plantación, esta casa ahora cubierta de maleza fue construida en 1915 por un arquitecto de Atlanta para una familia adinerada de Alabama.

Ejemplo cautivador del estilo Craftsman americano, la rústica propiedad se diseñó para fundirse con el paisaje, por lo que resulta bastante apropiado que la naturaleza la esté reclamando.

La fachada es típica del movimiento Arts and Crafts, con detalles en piedra y madera, y elementos como amplios aleros y ventanas enrejadas, que armonizan perfectamente con el entorno.

A diferencia de otras propiedades que hemos presentado hasta ahora, la casa, de construcción robusta, parece estar en buen estado desde el exterior.

Aunque está inundado de escombros y objetos personales, el interior parece estructuralmente sólido, y gran parte de los daños parecen ser puramente cosméticos. Fíjate en la gran escalera. Junto con el resto de la casa, era admirada por su sofisticado diseño.

Al parecer, uno de los vecinos llegó incluso a arrancar su escalera y sustituirla por una copia de esta obra maestra del Craftsman.

Abundan las antigüedades atractivas, incluso en el comedor, que tiene algunas piezas especialmente bonitas.

Al parecer, el propietario original traspasó la casa en los años cuarenta a su hija, que fue descrita como "el epítome de una elegante dama sureña" y permaneció en la propiedad hasta su muerte en los años noventa, a los 94 años.

Se cree que la casa está vacía desde entonces. En 2020, Kent informó de que la propiedad se había puesto a la venta con un precio de $500.000 (unos 465.000 €), pero el anuncio se retiró más tarde y no está claro si la antigua casa llegó a venderse.

Esperemos que un comprador con mucho dinero y aficionado a la arquitectura Arts and Crafts se haya hecho con ella y esté restaurando la casa para devolverle su antiguo esplendor.

Además de explorar y fotografiar edificios patrimoniales abandonados de gran valor arquitectónico, a Kent también le gustan los edificios comerciales abandonados de Alabama, que pueden ser igual de interesantes. Por ejemplo, el Hotel Governor's House de Montgomery, que fue una especie de institución local en sus mejores tiempos...

Construido en la década de los sesenta, contaba con 197 lujosas habitaciones y toda una serie de lujosos servicios, desde una cavernosa sala de banquetes hasta un campo de golf y el restaurante gourmet Rotunda y el Filibuster Lounge.

Con tanto que ofrecer, el hotel se estableció rápidamente como uno de los mejores centros de convenciones de Alabama.

El restaurante y salón circular, que ahora tiene peor aspecto, acogió a un número impresionante de personalidades a lo largo de los años.

Los políticos cenaban allí con regularidad (el hotel era también el lugar más solicitado de la ciudad para las fiestas de la noche electoral) y las estrellas de Hollywood de primera orden que se alojaban en el hotel casi con toda seguridad habrían comido en esta sala.

Según Kent, la lista de invitados e invitadas famosas incluiría a la actriz Whoopi Goldberg, que se registró mientras rodaba en Montgomery la película El largo camino a casa (1990).

Por desgracia, lo bueno no dura. El hotel empezó a pasar de moda y se suprimieron algunos de los servicios que lo hacían tan atractivo, como el campo de golf. Tras haber caído en desgracia, el hotel fue rebautizado como clase turista.

El edificio conservó algunas de sus características, como la piscina con la forma del estado de Alabama. Pero, a finales de la década de los noventa, era una sombra de lo que fue, cuando la competencia de los hoteles recién abiertos en el centro empezó a acabar con el negocio.

Al parecer, el Hotel Governor's House fue subastado a principios de 2010. Desde entonces, el edificio, que ahora reclama el estado de Alabama mediante un embargo fiscal, ha sufrido numerosos incendios y ahora está abandonado.

Esta maravilla victoriana tardía de Tuskegee, que data de la década de 1890, es una mezcla de dos estilos arquitectónicos: el estilo Reina Ana y el renacimiento griego temprano.

Fue construida por John Drakeford, fundador y presidente del City Bank de Tuskegee, quien, según Kent, encargó la mansión como regalo de bodas para su esposa.

La casa parece sacada de cuento de hadas, con su caprichosa torrecilla y la maravillosa escalera de caracol que adorna el vestíbulo.

Aunque carece de decoración y no está impecablemente limpio, el espacio parece estar en buenas condiciones, con las paredes y la escayola intactas, así como el suelo de madera.

El salón y el solárium, una adición posterior a la propiedad, también están en buen estado.

Estas habitaciones están repletas de magníficos elementos originales: el salón está adornado con cornisas, pilastras y apliques victorianos, mientras que el solárium está decorado con una llamativa fuente Art Nouveau.

Su propietario claramente no era tacaño…

Las grietas empiezan a notarse a lo grande en la sala de estar, a la que le falta un trozo de pared y techo.

La propiedad acabó en manos de un médico de Michigan, que la ha dejado desocupada durante más tiempo del que probablemente le gustaría recordar. El médico, nacido en Tuskegee, se dirigió a la universidad de la ciudad en 2018 con una interesante propuesta.

A cambio de restaurar la casa, la universidad podría utilizarla como centro de aprendizaje para la conservación histórica.

La Escuela de Arquitectura y Ciencias de la Construcción de la universidad ha estado trabajando junto con la ciudad de Tuskegee y varias organizaciones de conservación histórica para restaurar la histórica casa.

Uno de los edificios abandonados más curiosos que Kent ha encontrado es la lavandería Capital City de Montgomery.

Fundada a principios del siglo XX, la venerable empresa recibió una elegante remodelación en 1959, y en 1970 contaba con 11 locales en todo Montgomery.

El declive de la lavandería de gran tamaño se produjo en 1993, cuando los equipos de construcción que trabajaban en una obra cercana descubrieron que la friolera de 50 manzanas del centro de Montgomery estaban muy contaminadas con toxinas cancerígenas, incluido el componente clave del líquido de limpieza en seco.

Por razones obvias, se identificaron múltiples lavanderías y gasolineras de la zona como posibles fuentes.

Junto con otros negocios locales, la lavandería se vio obligada a cerrar tras casi un siglo en funcionamiento.

Como se suponía que la ropa estaba contaminada, se abandonó, y el edificio, que parecía un túnel del tiempo, es ahora una especie de museo de la moda de los años noventa y anteriores, en el que los y las fans de lo vintage se lo pasarían en grande si la ropa no fuera tan tóxica.

Además de los percheros de ropa, en el edificio permanecen congelados en el tiempo muchos otros objetos curiosos. Entre ellos, esta lista de precios de hace décadas, de la época en que costaba menos de $2 (unos 1,9 €) llevar a limpiar un traje "civil". Cómo han cambiado los tiempos...

Tras el sorprendente descubrimiento, los equipos de limpieza de la Agencia de Protección Medioambiental acudieron a Montgomery, pero no hubo una solución rápida.

El proceso de descontaminación fue dolorosamente lento, pero la formación de una alianza público-privada en 2012 para supervisar el proyecto fue decisiva para llevarlo a cabo.

Por fin, en 2020, la zona de 50 manzanas dejó de considerarse una amenaza para la salud pública y se desintoxicó oficialmente. Ahora es probable que la lavandería abandonada sea demolida algún día para dar paso a una nueva y reluciente urbanización.

Situada en Birmingham, esta casa de ladrillo estilo rancho de Bessemer se construyó en 1963 para el magnate del acero Norris Underwood y su esposa Mildred.

La peculiar casa, una cápsula del tiempo de la época, está repleta de toques kitsch de mediados de siglo y un montón de sorpresas asombrosas que la convierten en una auténtica propiedad única.

La pareja puso todo su empeño en crear la casa de sus sueños, derrochando en todo tipo de detalles personalizados, como esta estantería Art Decó y el marco de piedra, que hace las veces de separador de ambientes.

A la izquierda de la imagen, puedes distinguir la cocina hecha a medida, con sus antiguos muebles de madera oscura.

También hay una sala chillout con bañera, que está cubierta de la misma llamativa alfombra verde que cubre el suelo. Otros elementos extraños son la pajarera.

Los Underwood mandaron construir este recinto para albergar a sus numerosos pájaros. Pero no es, ni mucho menos, la mayor sorpresa de la casa.

Una de las características más inesperadas de la casa es la gigantesca zona abovedada de la piscina, construida en los años setenta.

Este espacio cavernoso, un paraíso tropical interior al estilo de la Mansión Playboy, está salpicado de falsas plantas exóticas que rodean una enorme piscina cubierta con una cascada de piedra, una pequeña piscina de inmersión y una ducha en forma de gruta. Y las sorpresas no acaban ahí.

Además de un pasadizo secreto, la propiedad esconde más de una hectárea de exquisitos jardines de estilo japonés.

Norris Underwood murió en 2006 y su esposa falleció seis años después. Su hija heredó la casa, pero la dejó vacía mientras luchaba por encontrar un comprador. Tras caer en ejecución hipotecaria, la casa se vendió finalmente en abril de 2020 por $255.000 (unos 237.200 €) a un comprador deseoso de renovarla.

Esperemos que esta insólita casa reciba el cariño que se merece.

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